Es de dominio público que el destacado A del Tijarafe Guanche Fonteide, Mario Hernández, ha sido uno de los luchadores más cuestionados por el entorno del club santaursulero. La responsabilidad de ser el segundo hombre fuerte del equipo y la falta de buenos resultados durante la primera mitad de la temporada hizo que se disparasen los rumores sobre su posible recambio. Sin embargo, el luchador herreño ha ido cogiendo el punto de forma y ya el pasado fin de semana dio el triunfo a los suyos, al tirar al puntal B del Benchomo, Óliver Gil.

"Los comienzos fueron complicados. Tanto la afición como el club no estaban contentos con mi rendimiento. Es normal, cuando las cosas no salen bien, las críticas se centran sobre los que tenemos más responsabilidad. No obstante, he ido ganando confianza y ahora las cosas están saliendo mejor", dijo.

El cuadro de Santa Úrsula es el tercer clasificado en la Liga Insular Cabildo de Tenerife de Primera Categoría a falta de seis jornadas y todavía cuenta con opciones de ganar el título. "Es difícil, pero no bajaremos los brazos. Mientras haya posibilidades matemáticas seguiremos intentándolo. No es fácil que el Victoria y el Punta Brava (primero y segundo respectivamente) pinchen, pero la Liga está muy igualada y cualquier equipo te da la sorpresa", comentó Mario Hernández.

La irregularidad ha sido uno de los talones de Aquiles del equipo santaursulero esta campaña. El luchador del Tijarafe matizó que la causa de estos altibajos puede venir de que "las plantillas en Primera están bien construidas. El cupo de destacados es reducido por lo que todos los equipos cuentan con buenos luchadores".

Por último, cuestionado sobre una posible pérdida de confianza en el puntal A Miguel Pérez (ha caído en las dos últimas jornadas ante el Brisas del Teide y el Benchomo), Hernández apuntó: "No sería justo cuestionarlo por dos malas luchada; más aún teniendo en cuenta la buena temporada que está haciendo".