El rey Juan Carlos ha resaltado hoy el papel de la Judicatura como institución clave para la convivencia, en el discurso de bienvenida a los 186 nuevos jueces, a los que ha garantizado todo el apoyo de la Corona y les ha recordado que la Constitución les atribuye "en exclusiva" la función jurisdiccional.

"Cada año somos testigos de cómo las sucesivas promociones de jueces españoles se suman a la apasionante tarea de servir a los ciudadanos desde la Judicatura, una institución clave para la convivencia", ha afirmado hoy el monarca en su discurso.

El rey ha animado a los nuevos jueces a trabajar "con ese espíritu de servicio a los ciudadanos propio de la vocación judicial, teniendo siempre presentes los principios, los valores y derechos fundamentales que la Constitución consagra".

En ese propósito, el jefe del Estado ha asegurado a los graduados que siempre podrán contar "con todo el apoyo de la Corona".

El rey ha presidido hoy la entrega de los despachos a 121 mujeres y 65 hombres que se incorporan al Poder Judicial en un acto en el Auditorio de Barcelona al que también ha asistido la reina.

En el acto solemne también han estado presentes el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar; el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas; el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, y la delegada del Gobierno, María de los Llanos de Luna.

En su discurso, Juan Carlos I ha recordado que la integración de esta promoción en el Poder Judicial se produce "en un año de gran simbolismo" porque coincide con los 200 años de la Constitución de 1812, que estableció la creación del Tribunal Supremo y marcó las bases del moderno Poder Judicial.

Dos siglos después, la actual Carta Magna "atribuye a los jueces y magistrados en exclusiva el ejercicio de la función jurisdiccional, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado", ha subrayado el monarca.

En el acto de entrega de los despachos también ha intervenido el presidente del TS, quien ha defendido que las críticas a las actuaciones judiciales "contribuyen a mejorar el sistema", siempre que "no supongan interpretaciones interesadas que desacrediten la institución judicial o constituyan juicios paralelos".

"En ningún caso es moralmente aceptable las descalificaciones personales ni la deslegitimación de las instituciones", ha añadido Dívar, quien ha advertido: "estamos sufriendo, a veces sin darnos cuenta, una auténtica crisis institucional".

La nueva hornada de jueces tiene un promedio de edad de 30 años y son mayoritariamente mujeres, ya que representan el 65 por ciento de los integrantes de la 62 promoción de la Carrera Judicial.

Los 186 nuevos jueces han estado de media cuatro años y dos meses para preparar y aprobar la oposición que les da derecho a una plaza de juez en España.

El 93 por ciento de los graduados conocen el inglés y el 26 por ciento el francés, al tiempo que 41 jueces conocen el catalán o valenciano, 17 el gallego y 1 el euskera, según informa el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Un total de 44 de los nuevos jueces irán destinados a Cataluña, 37 a Andalucía, 17 a la Comunidad Valenciana, 16 a Canarias, 14 a Galicia, 11 a Castilla-La Mancha y 9 tanto a Madrid como al País Vasco.

El resto de la promoción se distribuye entre 8 jueces a Murcia, 6 a Extremadura, 5 tanto a Baleares como a Castilla y León, 3 a Aragón y 2 a Cantabria.