Corea del Norte condenó hoy duramente la Cumbre de Seguridad Nuclear que se celebrará a finales de marzo en Seúl, un evento que definió como un "crimen imperdonable" y una "grave provocación" contra el país comunista.

El régimen de Pyongyang considera que el encuentro, que reunirá a jefes de Estado y de Gobierno de unos 50 países, es "una farsa infantil", según la agencia estatal norcoreana, KCNA.

"Nunca pasaremos por alto esta confabulación nuclear para hacer daño" a Corea del Norte, indicó KCNA, que amenazó con "aplastar decididamente" al "clan nuclear de los alborotadores y saboteadores de la paz".

Sin embargo, la agencia no especificó su Corea del Norte planea tomar algún tipo de medidas antes o durante la Cumbre de Seguridad Nuclear, que tendrá lugar el 26 y el 27 de marzo en Seúl.

Las autoridades norcoreanas criticaron que Corea del Sur, "una base de avanzada nuclear de EEUU", según la KCNA, sea el anfitrión de un evento que, consideró, está orientado a reforzar la coalición de países con armas atómicas contra Corea del Norte.

Seúl acogerá la segunda Cumbre de Seguridad Nuclear -en la que está previsto que participe, entre otros, el presidente estadounidense, Barack Obama- con un alto despliegue de seguridad que movilizará a 40.000 policías y un número indeterminado de efectivos del Ejército.

La declaración de Pyongyang contra de la cumbre nuclear se produjo un día antes de que representantes de Corea del Norte y Estados Unidos se citen mañana en Pekín para retomar su diálogo sobre la desnuclearización del país comunista, interrumpido por la muerte de Kim Jong-il en diciembre.