Ciudadanos y Por Tenerife no solo presentaron una moción conjunta sobre el PGO, sino una de rechazo a la reforma laboral de Rajoy. Como era de esperar, y ante las posturas previas de cada grupo, la iniciativa contó con el respaldo de CC, PSOE y Sí se Puede, que coincidieron por completo en los puntos del acuerdo, aunque con algunos matices de nacionalistas y socialistas sobre la exposición de motivos.

Corrales fue especialmente duro con el PP en sus intervenciones y recalcó que, junto a la promesa de que no se subirían los impuestos, el PP también ha incumplido sus promesas electorales con la rebaja del despido y con una reforma que califica como la más regresiva de la historia democrática española, favorable al "capital" y "perjudicial" para los trabajadores.

El PSOE y CC censuraron, sobre todo, que la reforma no sirva para crear empleo, sino para destruirlo, así como que "desvirtúe y desequilibre" el mercado laboral, aunque confían en que sea enmendada en el trámite parlamentario. SSP aseguró que se pasa del siglo XXI al XIX.

Pablo Matos (PP) criticó que se rechazara la reforma en su conjunto y no se analizara cada punto de la misma, insistiendo en que su objetivo pasa por acabar con los 5,3 millones de parados.