El Programa de Promoción Europeo del Aceite de Oliva muestra cómo utilizar este producto al preparar huevos fritos. Con una sartén, un poco de sal, un huevo y aceite de oliva, lo demás está hecho. Tan sólo se necesita calentar el aceite de oliva en la sartén, cascar el huevo y verterlo. En uno o dos minutos este delicioso plato estará listo, basta con sazonarlo con una pizca de sal y ya está.

Hay trucos que harán a este plato todavía más suculento. Si se busca un huevo con puntillas, lo mejor es esperar a que el aceite esté muy caliente para verterlo; durante la fritura, se aconseja rociar el huevo con un poco de aceite de oliva, ayudándose de una espumadera; si se prefiere la yema más cruda basta con echarla unos segundos después de haber vertido la clara.