Tenerife quiere entrar en la Red Transeuropea de Transporte, o, mejor dicho, en su zona noble: la red principal. Hoy, las infraestructuras insulares se sitúan, al menos virtualmente, en la denominada "red global". El objetivo es conseguir dar los dos pasos -el visto bueno del Ministerio de Fomento y de la Comisión Europea- que se necesitan para que las principales instalaciones de transporte tinerfeñas tengan acceso a la financiación millonaria que recibirán aquellas que acaben siendo incorporadas a esa suerte de primera división que es la categoría básica o principal.

Sin embargo, y más allá de deseos o necesidades, esta es una historia que se viene moviendo, por encima de cualquier otra consideración, entre un consenso inusitado y la polémica. Al tiempo que ninguna voz ha dejado de apoyar lo positivo de la entrada de Tenerife en la Red Transeuropea, hay controversia de sobra y acerca de asuntos tan variados como el cumplimiento o no por parte de la Isla de las condiciones necesarias para formar parte de la red básica, cuál fue el gobierno "culpable" de la exclusión, qué infraestructuras se quieren incorporar o si se debía estudiar mejor los pasos siguientes antes de solicitar nada al Ministerio de Fomento.

¿Pero qué es?.- A pesar de la terminología un tanto opaca que, quizá, envuelve al proyecto y que podría motivar la indiferencia del ciudadano, este no es otra cosa que una planificación de redes de transporte destinada a facilitar la comunicación de personas y mercancías a lo largo de la Unión Europea (UE).

El modelo que propone la UE se articula en dos tipos de redes. Por un lado, la tan "de moda" y "deseada" red principal es el componente destacado de la Red Transeuropea, habida cuenta de que recoge las infraestructuras estratégicamente más importantes y podría contar, en los próximos siete años -por aquello de que los períodos de financiación comunitarios se articulan en siete años-, con una cifra cercana a los 50.000 millones de euros. Esta, que tiene como período de terminación 2030, se contrapone a su "hermana menor" la red global, que finaliza en 2050 y que recoge todas las instalaciones de transporte, existentes o planificadas, que cumplen con los requerimientos para participar en el transporte europeo.

Todos a una.- Aunque polémica también hay, seguramente lo más llamativo del intento de inclusión de las infraestructuras de Tenerife en la Red Transeuropea es una coincidencia de criterio de difícil parangón entre partidos, colectivos y administraciones, pues todos dicen apoyar el fondo de la cuestión: que las instalaciones de transporte de la Isla puedan disponer del instrumento financiero que el vicepresidente del Cabildo, Carlos Alonso, llegó a definir como "uno de los más potentes".

La rueda de prensa en la que Alonso pronunció aquellas palabras iniciaba un proceso que, en algo menos de dos semanas, ha tenido no pocas filiaciones: desde Melchior, que le llegó a exponer la problemática a la delegada del Gobierno en Canarias, a Alarcó, pasando por la Cámara de Comercio o la Plataforma para la Promoción del Puerto de Santa Cruz de Tenerife.

Pero, al margen de versiones individuales, el Pleno del Cabildo aprobó la moción en la que se pedía instar al Ministerio de Fomento a que rectificase la solicitud que envió a la Comisión Europea para que se incluyeran en la red principal los dos aeropuertos de la Isla y el puerto de Santa Cruz; y en la red global, el puerto de Granadilla, los trenes del Norte y del Sur, y la plataforma logística del Sur.

Contradicciones.- El fondo lo comparten todos -o eso parece- pero hay puntos de desacuerdo ya se vio en el propio pleno del Cabildo, en el que se produjo a abstención popular, que el conservador Manuel Torres sostuvo en que era preferible buscar criterios que permitiesen la entrada de Tenerife en la red principal antes de aventurarse a pedir una rectificación al Ministerio de Fomento. Y es que la bancada popular insistía, entre algún mensaje al gobierno socialista responsabilizándolo de la situación, en que las infraestructuras tinerfeñas no reúnen los requisitos para estar en la red principal. Mientras, CC defendía lo contrario.

No obstante, lo de ahora es tan o más chocante que lo anterior: la Proposición No de Ley (PNL) que ha presentado el socialista José Segura a la Mesa del Congreso, con la que se pide al Gobierno que modifique la solicitud remitida a la Unión Europea, es un calco del acuerdo aprobado por el Cabildo; sin embargo, la PNL que se discutirá en el próximo pleno del Parlamento de Canarias solicita la inclusión en la red básica del puerto de Santa Cruz en conjunto con la futura instalación de Granadilla, sitúa al Reina Sofía también en la categoría principal, pide la incorporación de los corredores ferroviarios capital-sur de las islas de Tenerife y Gran Canaria a la red global y se refiere a una plataforma logística que integra las dos islas centrales. Peticiones con puntos comunes, pero diferentes. Fomento y Europa dirán.

RUano

¿Se cumplen los criterios?

José Miguel Ruano, presidente del Grupo Nacionalista Canario y autor de la Proposición No de Ley (PNL) que será llevada al pleno del Parlamento de Canarias para instar al Gobierno central a promover ante la Unión Europea la inclusión de las infraestructuras tinerfeñas en la Red Transeuropea, señala que el puerto de Santa Cruz de Tenerife y el futuro puerto de Granadilla habrán de ser defendidos como un "sistema integrado portuario" para cumplir con "el planteamiento inicial de la comisión para la clasificación de los puertos", que exige contar con más del 1 por ciento del tráfico europeo. En este sentido, el consejero precisa que La Luz y Las Palmas sí lo producía y, "por tanto, entró directamente", y subraya que la estrategia más adecuada es que este asunto no se plantee en términos de "confrontación interna en Canarias, porque no tiene ningún sentido". En palabras de Ruano, la otra infraestructura tinerfeña con posibilidades de entrar en la red básica es el aeropuerto de Tenerife Sur, del que, puntualiza, sus condiciones "son superiores a la totalidad de los aeropuertos que el ministerio pretende incluir".