España pidió ayer a la Unión Europea (UE) el mantenimiento de la ayuda para frenar la llegada de inmigrantes irregulares a territorio comunitario, a pesar de la disminución de la presión migratoria de los últimos meses.

En un Consejo de Ministros de Interior de la UE, el titular español, Jorge Fernández Díaz, subrayó la importancia de esos fondos y expresó su confianza en que no se vean mermados por las ayudas que la UE tiene previsto destinar en el marco de la asistencia a los países de la llamada "primavera árabe".

"Hemos planteado que la ayuda que entendemos que es precisa por la Primavera Árabe (...) no vaya en detrimento de la ayuda que es preciso mantener en el Mediterráneo occidental y la zona atlántica", indicó el ministro español en rueda de prensa.

En la reunión de ministros de Interior de la UE se trató sobre la inmigración irregular y de la creación de una red común de solidaridad en favor de los países que afrontan problemas relacionados con las solicitudes de asilo, en particular Grecia.