"Solo los médicos, y por un criterio exclusivamente médico, deberían ser los que decidieran qué fármaco se le ha de recetar a un paciente". Con esta palabras el presidente del Colegio de Médicos de Santa Cruz de Tenerife (Comtf), Rodrigo Martín, resumía su entrevista de ayer con los portavoces de los cuatro grupos parlamentarios y el presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro.

"Hemos querido explicar a los grupos parlamentarios y al presidente de la Cámara autonómica que no existe ningún tipo de polémica por parte de los facultativos en lo que al principio activo se refiere, pero que consideramos necesario llegar a un acuerdo con la Dirección General de Farmacia del Gobierno de Canarias para que los médicos tenga libertad para, en un momento, no recetarlo", explicó Martín, antes de detallar que el problema de base radica en "la logística de la prescripción",

A su juicio, "el sistema informático ideado por el Gobierno de Canarias debe facilitarle al médico la posibilidad de recetar el fármaco más adecuado, sea el principio activo o el de marca, porque no es lo mismo. El principio activo tiene otros componentes añadidos que el original, porque de lo contrario estaríamos hablando de una copia y eso no existe. Tienen excipientes y el efecto que esos componentes tienen en el paciente quien único los conoce y sabe qué reacción pueden causar en el paciente es el médico".

"Quiero dejar claro que no estamos en contra del genérico; ni mucho menos. Para muchos pacientes es tan buena opción como el original, pero queremos que se deje decidir al médico en el caso que esto no sea así para otros pacientes", añadió el dirigente colegial antes de insistir en que "no hay nadie que sepa más sobre las patologías que tiene un paciente y, por eso, es el que debe decidir sobre su tratamiento".

Según Martín, "está habiendo reacciones adversas por parte de los pacientes a su tratamiento y en esos momentos su médico debería tener libertad para cambiar su medicación sin grandes problemas basándose en un criterio médico".

Con este encuentro en el Parlamento, la profesión médica quiso salir al paso de la declaración institucional realizada por PP, PSOE, CC y NC hace un mes en la que rechazaban la postura de los dos colegios oficiales de las islas por la que aconsejaban a los pacientes que exigieran fármacos de marca en vez de genéricos cuando tuvieran el mismo coste, aludiendo a que tienen menos riesgos y evitan confusiones.

Tras esta declaración, la respuesta del Parlamento fue la de calificar la postura colegial de "injustificada" y los acusaron de "sembrar la incertidumbre en la ciudadanía sobre la prescripción y consumo de principios activos que se realiza en todo el sistema sanitario público en España".

"La postura de los colegios no responde a base científica alguna y crea inseguridad y alarma en la población, al cuestionar la calidad y la seguridad de la prescripción por principios activos", criticaron los portavoces parlamentarios.

Sin embargo, ayer Rodrigo Martín aseguró que "hemos aclarado que no estamos contra el principio activo sino que defendemos la libertad de prescripción médica, y demostramos que la actual logística lo impide a diario, por eso confiamos en que en próximas reuniones con la Dirección General de Farmacia todo este asunto quede resuelto definitivamente".

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