Las cuentas del sistema de la Seguridad Social registraron en enero un saldo positivo de 2.797,46 millones de euros, equivalentes al 0,26 % del PIB, después de que en 2011 cerraran con un déficit del 0,09 % del PIB, según los datos de ejecución presupuestaria publicados hoy por el Ministerio de Empleo.

El superávit de enero es un 47,2 % superior al registrado en el mismo mes del año pasado, cuando se obtuvo un saldo positivo de 1.900,50 millones de euros, un incremento que se debe al adelanto de las transferencias del Estado y a que aún no se han contado algunos gastos por bajas temporales.

Sin contar con esta circunstancia, el superávit de enero se situaría en 1.837,46 millones de euros, inferior en un 3,32 % al registrado en igual periodo del ejercicio anterior.

De acuerdo con la cifras de ejecución de enero, los ingresos no financieros (fundamentalmente cotizaciones) alcanzaron los 11.139,22 millones, el 12,65 % más que un año antes, mientras que los gastos (pensiones y prestaciones) fueron de 8.341,76 millones, un aumento del 4,43 %.

En un comunicado, el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, subraya que este superávit "debe analizarse con cautela porque enero nunca es representativo en los datos de ejecución presupuestaria y el ritmo de destrucción de afiliación, que encadena siete meses a la baja, sigue lastrando la principal fuente de ingresos del sistema".

La nota señala que faltan por contabilizar los gastos pendientes de imputación presupuestaria, que a esta fecha alcanzarían un importe aproximado de 300 millones de euros (correspondientes fundamentalmente a bajas temporales).

Además, en los ingresos se incluyen unas mayores transferencias recibidas del Estado por importe de 959,95 millones, como consecuencia del adelanto en el calendario respecto al ejercicio 2011, cuyo efecto se irá ajustando en los próximos meses.

El Ministerio reconoce que esta transferencia ha sido determinante en el resultado, ya que sin tenerla en cuenta los ingresos no financieros habrían caído el 2,94 %.

Del conjunto de los ingresos no financieros, el 81 % del total corresponde a las cotizaciones sociales, que ascendieron a 9.023,58 millones de euros, el 1,76 % más respecto al mismo periodo del año anterior, debido el descenso de la cotización de desempleados en un 0,32 %, mientras que la cotización de ocupados registró un subida del 1,99 %.

Las prestaciones económicas a familias e instituciones totalizaron 8.075,97 millones de euros, cifra que representa un 96,81 % del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social.

La mayor partida (7.621,74 millones) corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un crecimiento interanual del 4,40 %.