La calidad asistencial y sanitaria de los vecinos de San Isidro ha mejorado considerablemente con la reciente puesta en marcha del nuevo consultorio médico de este populoso barrio de Granadilla de Abona, infraestructura que entra en servicio con casi dos años de retraso.

"El nuevo complejo viene a poner fin a las dificultades que en materia de sanidad ha venido soportando el núcleo poblacional, donde los pacientes teníamos que acudir a un recinto que estaba deteriorado y que, por tanto, no reunía ningún tipo de condiciones", señalan miembros de la asociación de vecinos, quienes recuerdan que "usuarios como profesionales soportábamos estreches y mucho calor durante el verano ante la imposibilidad de instalar suficientes aires acondicionados que dieran frescor al antiguo complejo".

"La espera se ha hecho eterna, pero ahora contamos con un recurso sanitario de bastante calidad. Esperemos que la Consejería de Sanidad del Ejecutivo regional no haga ningún recorte que pueda afectar a la operatividad del centro y, en todo caso, lo que debe hacer es impulsarlo para aprovechar dicha infraestructura", comentan residentes.

De este modo, destacan que el nuevo espacio "se debe configurar como un complejo asistencial del conjunto del municipio, en particular, y de la comarca, en general, al estar preparado para prestar el servicio de Urgencias, que al parecer no ha entrado en servicio".

El nuevo complejo, que cuenta con varias alturas y se sitúa enfrente del antiguo centro de salud, está diseñado para atender a una población que supera los 20.000 habitantes.

En sus 3.200 metros cuadrados se han creado más de una veintena de consultas entre medicina general, Pediatría y Enfermería, así como salas polivalentes. Además, tendrá un área de atención bucodental y otra de Urgencias.