La Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (Camfic) ha recordado este miércoles la importancia de revisar los fármacos del botiquín doméstico cada tres meses, que debe ubicarse en un espacio limpio, sin humedad, protegido de la luz y en su envase original.

En un comunicado, la Camfic ha señalado asimismo que es mejor anotar de forma exacta la dosificación de los medicamentos en niños y ancianos, y en el caso de tratamientos concretos es "más eficiente" que no se mezcle el medicamento con los productos del botiquín.

Más allá de los elementos básicos que debe tener un botiquín, como el agua oxigenada, el yodo, pinzas, tiritas, vendas, gasas, termómetro, esparadrapo y analgésicos, entre otros, la asociación recomienda no utilizar algodón en heridas abiertas y estima oportuno añadir un fármaco para la diarrea, protector solar y repelente de insectos en caso de viaje.