Un estudio internacional coordinado por el Centro Médico Erasmus en Rotterdam (Holanda) revela que los niños que nacen de forma prematura podrían tener más dificultades para desarrollar sus habilidades lingüísticas durante la infancia, tanto al leer como al escribir. Así se desprende de los resultados de un estudio publicado en la revista Pediatrics en el que se analizaron datos de 1.529 niños prematuros nacidos antes de la semana 37 de gestación y 945 nacidos en la fecha prevista.

De este modo, y según reconocen los autores, observaron que nacer prematuramente no conlleva que estos bebés estén destinados a tener problemas lingüísticos a largo plazo, pero sí que pasen por momentos más difíciles, sobre todo entre los 3 y 12 años de edad. "A medida que crecen, los niños nacidos sufren dificultades con las funciones lingüísticas más complejas", apuntó Inge van Noort-van der Spek, autor del estudio.

Los resultados mostraron que en los primeros dos años de vida apenas hubo diferencias entre los niños prematuros y el resto en lo que respecta a sus capacidades lingüísticas básicas, como el desarrollo de vocabulario básico. Sin embargo, entre los 3 y los 12 años la brecha solía ampliarse cuando se trata de habilidades lingüísticas más avanzadas, como la lectura y escritura de oraciones complejas, precisamente cuando más lo necesitan, según los expertos, lo que puede dar lugar a "problemas y limitaciones en las actividades escolares o sociales de esos niños".

"Los niños prematuros corren el riesgo de sufrir problemas de lenguaje y, a medida que las tareas lingüísticas se vuelven más necesarias, la proporción de chicos con problemas importantes también aumenta", añadió la pediatra Thuy Mai Luu, de la University of Montreal en Canadá. En la investigación, esta experta descubrió que los niños prematuros suelen "alcanzar" a sus contemporáneos en el lenguaje básico.