El Ayuntamiento de La Orotava se reunirá con representantes de la Iglesia y de las hermandades y cofradías del municipio para evitar que la cera de las velas y cirios de las procesiones religiosas genere inseguridad vial en las calles del casco histórico. Desde el gobierno local (CC) se convocará a la comisión mixta de la Semana Santa para consensuar medidas que eviten que la cera caiga sobre los adoquines y cause, como ha ocurrido en los últimos días, caídas de peatones y accidentes de vehículos.
El consistorio pretende que se generalice el uso de cubre velas u otros dispositivos que eviten que la cerca caiga al suelo. La Policía Local villera ya ha alertado del incremento en el número de incidentes relacionados con la resbaladiza combinación de cera y adoquines.
Aparte de las caídas de viandantes, lo que más preocupa en el consistorio villero son los deslizamientos de vehículos. Debido a la presencia de cera tras las procesiones de Semana Santa, se han producido caídas de motoristas y algunos coches han terminado subidos sobre aceras de las empinadas calles del casco villero.
Las medidas que se acuerden se adoptarán de inmediato y no está previsto esperar hasta la próxima Semana Santa, ya que La Orotava acogerá numerosas procesiones con anterioridad.
Ayuntamientos como el de Granada, en Andalucía, ya han tomado medidas contra este problema. En septiembre de 2008, el consistorio granadino anunció el reparto de 20.000 conos para evitar que la cera de las velas cayera al suelo durante la procesión de la Virgen de las Angustias, patrona de la ciudad.
La iniciativa, que ya se había aplicado en años con la colaboración de los cofrades de la Virgen de las Angustias, se enmarca en el caso de Granada en las tareas del plan especial de limpieza del Ayuntamiento para atender de forma preferente todo el recorrido de la procesión.
Para evitar la presencia de cera en las calles de Granada, más de una veintena de operarios limpian la cera de todo el recorrido con equipos que usan agua caliente y disolvente a alta presión.