El obispo de la Diócesis nivariense, Bernardo Álvarez, bendijo ayer, junto a la iglesia de Nuestra Señora de La Concepción de La Laguna, frente a la plaza Doctor Oliveira, el acto de inauguración del monumento del beato Papa Juan Pablo II, donado por la Fundación Juan Kobylansky y la Unión de Sociedades y Organizaciones Polacas de América Latina (Usopal) que preside.

La Eucaristía de la Octava de Pascua se celebró a las 11:00 horas en la Sede Catedral y, a continuación, se procedió a la bendición del monumento. La fecha elegida para la inauguración de esta pieza artística fue el domingo llamado de la Divina Misericordia, por ser el "aniversario litúrgico" de la muerte de Juan Pablo II, que fue precisamente llamado por Dios a su presencia la víspera de la solemnidad de la Divina Misericordia, la cual fue instaurada por el citado Pontífice.

El monumento, obra del artista polaco Czeslaw Dzwigaj, es una estatua en bronce del beato Juan Pablo II de cuerpo entero, revestido litúrgicamente y bendiciendo a una niña y a un niño vestidos con ropas típicas de Canarias. El conjunto escultórico pesa cerca de una tonelada y mide 2,20 metros.

Al acto asistieron, invitados por la fundación, cuatro personalidades del Vaticano y 47 ciudadanos de Polonia. Además, participaron representantes de asociaciones polacas de distintos países, dos de Suecia, dos de Austria, dos de Francia, uno de Noruega, uno de Escocia, tres de Canadá, tres de Estados Unidos, dos de México, dos de Chile, cuatro de Argentina, tres de Brasil, tres de Uruguay y uno de Paraguay.

Juan Kobylanski es presidente y director de varias firmas comerciales e industriales. Fue cónsul honorífico de Paraguay en España durante 14 años y cónsul honorífico de Polonia en Uruguay desde 1989 hasta 2000. Por otro lado, es fundador de monumentos a Juan Pablo II en Uruguay, Argentina y Polonia.