Del CD Tenerife juvenil que se proclamó campeón de Canarias en la temporada 2008/2009, superando por última vez a la UD Las Palmas, y que alcanzó las semifinales de la Copa del Rey en esa misma campaña, tras eliminar al Deportivo y al Real Madrid, han llegado a jugar con el primer equipo blanquiazul a lo largo del último año Germán, Bruno, Ayoze, Jesús, Abel... y ahora Sandro. El interior dio todavía más prestigio a aquella generación al debutar con el Tenerife el pasado domingo, sustituyendo a Tacón en el minuto 59 del encuentro con el CD Lugo.

Antes que él lo hicieron los citados cinco canteranos, todos en la recta final del ejercicio 2010/2011 por decisión de David Amaral. De ellos, Abel, Ayoze, Germán y Jesús tuvieron continuidad en el presente ejercicio, aunque los dos últimos salieron cedidos en enero, al Dénia y al Leganés. Por su parte, Bruno milita a préstamo en otro equipo de Segunda B, el Teruel.

El que fue ayudante de David en esa etapa, Quique Medina, ahora convertido en el técnico de la plantilla profesional, dio otro paso más y confió en Sandro, al que tuvo a sus órdenes esta Liga en el filial.

Sandro Rodríguez Felipe (26 de mayo de 1990) llegó a la cadena de formación del Tenerife en edad infantil, después de comenzar su carrera en el Geneto y el Sobradillo, con la ventaja de tener un entrenador en casa, ya que su padre ha estado siempre ligado al fútbol. Se trata de Iván Rodríguez, el descubridor del jugador tinerfeño del FC Barcelona Pedro Rodríguez, al que enseñó desde los alevines del Raqui San Isidro, y en la actualidad prepara al Águilas Atlético.

Como blanquiazul, Sandro fue subiendo peldaños hasta participar en el mencionado campeonato autonómico juvenil y quedarse a un paso de la final de Copa. Pero la campaña siguiente le tenía reservada otra nueva experiencia, su estreno en la Segunda B. Con 19 años fue elegido por Alfredo Merino para disputar la última me-dia hora de la visita del Tenerife B al Puertollano, en septiembre de 2009. Después vinieron once encuentros más, en los que tuvo la ocasión de jugar en estadios como el del Leganés o el Real Oviedo.

El 4 de abril de 2010 se despidió de la categoría de bronce, al intervenir en el choque con el Guadalajara, en el CIAT de Tíncer (0-1), hasta su reciente retorno en el compromiso con el CD Lugo.

El suyo es el primer debut de un canterano en la Liga 11/12. Tuvieron que pasar 34 jornadas para que se apostara por alguien del filial.