La bolsa española ha perdido hoy los 7.000 puntos por primera vez desde marzo de 2009, con lo que marca un nuevo mínimo anual y se acerca a los niveles de septiembre de 2003.

El principal indicador español, el IBEX 35, ha cedido un 2,42 % en la sesión, lastrado por la caída de los grandes valores y a pesar de la elevada demanda registrada hoy en la subasta de bonos y obligaciones del Tesoro.

Esto, unido a los rumores de que Francia podría perder la máxima calificación crediticia, arrastraba al IBEX 35 hasta los 6.908 puntos, con lo que las pérdidas acumuladas desde principios de año ascienden al 19,36 %.

La prima de riesgo -el sobrecoste que exigen los inversores por comprar deuda española en lugar de alemana- se incrementaba poco antes del cierre hasta los 423 puntos básicos.