El cantante Alejandro Sanz, vestido de riguroso luto, ha despedido hoy, rodeado de su familia, a su madre, María Pizarro, que ha sido incinerada este mediodía en el tanatorio de Chiclana de la Frontera (Cádiz).

Acompañado de su hermano, entre otros allegados, el cantante ha asistido al responso ofrecido hoy en el tanatorio chiclanero, donde ha transcurrido el velatorio de su madre, que falleció la noche del jueves en su localidad natal, Alcalá de los Gazules (Cádiz), a consecuencia de un infarto.

Rodeados de una gran expectación mediática, también han asistido al responso, entre otros, la cantante Malú y el presentador Jesús Quintero, que han acompañado al cantante de origen gaditano.

Sanz había llegado a primera hora de esta mañana al tanatorio vestido con una chaqueta de cuero roja, un pantalón vaquero, gorra y gafas de aviador.

Horas después, vestido de luto, asistió al responso por su madre, quien falleció sobre las once de la noche del jueves en su casa de Alcalá de los Gazules, en la que, según fuentes municipales, pasaba una temporada coincidiendo con las fiestas patronales del municipio.

Este pueblo, en el que Alejandro Sanz pasó los veranos de su infancia y su adolescencia y al que el cantante suele escaparse cada año para estar con su familia materna, ha despedido así a María Pizarro, miembro de una familia que, además, tiene entre sus miembros a políticos como el exconsejero de Gobernación y diputado autonómico socialista Luis Pizarro.

Ayer, al conocer la muerte de su madre, Alejandro Sanz compartió en su cuenta de twitter su dolor, diciendo que "se fue la jefa" y recordando que "su verdad era de mármol y su candor de piñas verdes".