El recinto de la Feria de Abril de Sevilla ya está preparado para acoger desde la medianoche del próximo lunes su 165 edición, que este año se prevé marcada por la crisis y ha motivado que, por primera vez, el ayuntamiento suspenda las tradicionales recepciones en su caseta principal.

El delegado de Fiestas Mayores, Gregorio Serrano (PP), en declaraciones a Efe, ha justificado la anulación de las recepciones por la necesidad de "dar ejemplo" y por "solidaridad" con los más de 86.000 parados sevillanos y con los funcionarios municipales a los que se les recortará el sueldo por un plan de ajuste aprobado.

"No es el momento de dar recepciones", ha concluido el concejal antes de mostrar su confianza en que el buen tiempo anunciado permita la afluencia masiva de personas al recinto ferial y palíe en parte la bajada de negocio experimentada en Semana Santa por culpa de la lluvia.

Así, en las 1.048 casetas de Sevilla familiares, de empresas, asociaciones y particulares esperan que no se produzca el descenso de la facturación registrada en Semana Santa, que ha sido del 11 % en los hoteles y del 30 % en la hostelería.

Los rumores en Sevilla indicaban que muchas de las casetas se quedarían sin sus adjudicatarios habituales, lo que ha desmentido el delegado de Fiestas Mayores al asegurar que sólo ha habido una renuncia y ha sido por cuestiones internas entre los socios y no por la crisis.

Esa caseta ha sido ocupada por una persona que llevaba 22 años en lista de espera, que está formada por 1.400 peticiones, siete de las cuales llevan 21 años esperando.

El año pasado ya se registró un menor consumo en la Feria a pesar del buen tiempo que hizo, según dijeron algunos responsables de los bares instalados en el interior de las casetas, y además se comprobó que el Real registraba la presencia de ciudadanos más tarde de lo habitual porque ya llegaban comidos de sus casas para ahorrar dinero.

Como las circunstancias económicas no han cambiado desde el año pasado e incluso han empeorado, se prevé que en esta Feria sean más habituales las "sevillanas de la crisis", que fueron creadas en 2010.

En estas sevillanas se indica que en la zona de atracciones de feria "este año no me meto, ya le he dicho a mis niños que los cacharritos son el metro", y también se afirma que "como está todo el mundo tieso, no hay quien pida una ración ni de gambas ni de queso".