El Ayuntamiento de La Laguna, a través del área de Obras e Infraestructuras, quiere abrir cuanto antes la playa del Arenal, situada entre Bajamar y Punta del Hidalgo, y que, pese a ser la más importante del municipio, permanece cerrada para el tránsito de personas desde comienzos de 2010.

Por ello, el concejal del área, Jonathan Domínguez, ha encargado a la empresa Traverca un informe detallado sobre el estado total del acantilado, cuya longitud es de unos cuatro kilómetros, desde el antiguo hotel Nautilus de Bajamar hasta el barranco de la Punta del Hidalgo, para garantizar los accesos directos a la playa. Esta empresa ya se encargó, el pasado mes de marzo, de los trabajos que permitieron la caída controlada de varias rocas de gran tamaño que se encontraban sueltas y cuyo riesgo de caída era inminente (trabajos que costaron 863 euros y que fueron llevados a cabo tras pedir la pertinente solicitud a la Dirección General de Costas para que aprobara su autorización).

Cabe recordar que después del accidente ocurrido en la playa de Los Guíos, en Santiago del Teide, en 2009 y tras los derrumbes de piedras en diciembre de ese año en el acantilado de la playa del Arenal, el ayuntamiento cerró los accesos a la playa y colocó unos carteles advirtiendo del riesgo de desprendimiento. Desde entonces han pasado ya dos años y medio con informes diarios de la Policía Local sobre el estado de las balizas, vallas y señalización que son remitidos al área de Servicios Municipales y a Costas.

La idea del consistorio es garantizar cuanto antes el acceso seguro de los usuarios a la playa del Arenal, una vez se decida, en base al citado informe, cuál es la posibilidad más factible.

En este sentido, cabe especificar que de mallarse todo el acantilado su coste podría ascender a 1,5 millones de euros y que entrañaría cierto impacto visual. En todo caso el trámite durará como mínimo dos años ya que deberá redactarse el proyecto, buscar financiación y solicitar permiso a la Dirección General de Costas.

Así, para este verano la situación continuará prácticamente igual, por lo que se seguirá prohibiendo el paso, pese a que son muchos los usuarios que hacen caso omiso a la señalización y acceden a la playa bajo su responsabilidad.

Por otro lado, Domínguez sostiene que el antiguo proyecto para la realización de un sendero por el litoral que diera acceso a la playa está prácticamente descartado debido a su alto coste (seis millones de euros). En su lugar se intentará realizar un proyecto intermedio, después de estudiar las directrices que estipule el citado estudio encargado a la empresa Traverca por un importe de 1.200 euros y que estará terminado este verano.

Cabe la posibilidad de que existan zonas del acantilado que no sean recuperables y que esa zona quede cortada para siempre, previsiblemente sería el caso de la zona más peligrosa que comprende el tramo entre el antiguo hotel Nautilus y el antiguo hotel Neptuno, en Bajamar, donde existe muy poca superficie de callado pero mucha verticalidad del acantilado, que, además, está compuesto por sedimento suelto.

Entre las distintas posibilidades que deberán estudiarse están el arreglo de la bajada por el hotel Neptuno, mallando la parte de acantilado correspondiente; la realización de un sendero similar al que da acceso a la playa de Benijos, en Anaga, partiendo desde la carretera general, a la altura del mirador, utilizando siempre materiales de la zona; o la recuperación del acceso a la playa a través del barranco de Punta del Hidalgo.

Actualmente, el charco de La Laja, en Bajamar, y el citado tramo de costa entre Bajamar y Punta del Hidalgo permanecen cerrados al tránsito por razones de seguridad.