La consejera de Empleo del Gobierno de Canarias, Margarita Ramos, ha dicho hoy que la última Encuesta de Población Activa (EPA), que revela un aumento de 20.400 parados en las Islas, supone que "la destrucción de empleo comienza a ralentizarse", porque solo 3.200 tenían trabajo antes.

Y es que, al analizar las cifras de la EPA del primer trimestre del año, publicadas hoy, hay que matizar que, "si bien la tasa de paro en Canarias ha subido al 32,28 %, lo que es verdaderamente increíble es que hayamos registrado en un trimestre 17.200 nuevos activos, es decir, 17.200 nuevas personas que se inscriben como demandantes de empleo", ha subrayado la consejera.

Ramos ha añadido que "esta cifra es importante tenerla en cuenta, porque en el último trimestre de 2011 Canarias registró algo más de 20.000 nuevos desocupados" o personas que tenían empleo y lo perdieron, mientras que en el primero de 2012 lo que ha ocurrido es que se ha dado "un crecimiento exponencial, muy potente, de nuevos activos que se inscriben como demandantes de empleo".

Lo que supone que, "en definitiva, la destrucción neta de empleo fue de 20.000 personas a finales de 2011, y la destrucción neta de empleo de este trimestre son 3.200 personas", ha explicado la consejera a preguntas de periodistas antes de presidir un acto de celebración del Día Mundial de la Seguridad y Salud Laboral.

Por ello, Ramos, que ha admitido que "estas cifras, en principio, pueden presentarse como negativas", ha invitado a "escudriñar y analizar en profundidad" los resultados de la encuesta antes de hacer un balance de ellas.

Porque, según las interpretaciones del Gobierno autonómico, lo que está ocurriendo en Canarias, que "lidera y con mucho" las cifras de nuevos demandantes de empleo entre las distintas regiones españolas, es que, "ahora mismo, muchos jóvenes que están estudiando, de Formación Profesional y universitarios, se inscriben como demandantes de empleo", ha expuesto.

Y ha añadido que desde el Ejecutivo se ha hecho "un análisis inicial, no todavía perfectamente desmenuzado en profundidad", que apunta que "cuando una persona en una familia pierde su empleo, todos los miembros de la familia tratan de inscribirse como demandantes de empleo" aunque no trabajaran antes.

En todo caso, la consejera ha opinado que "estas cifras ponen de manifiesto que el sector privado, prácticamente, ha tocado fondo en la destrucción de empleo", y que deben tomarse medidas para que no siga creciendo el paro.

Porque "si Canarias sigue destruyendo empleo vamos a tener serios problemas de cohesión social, y la falta de cohesión social va a afectar a la cohesión económica" y a dificultar objetivos como los de atraer inversiones o turistas, ha argumentado.

Has insistido en que, "por consiguiente, hay que frenar la destrucción de empleo y ahora le toca a los responsables políticos públicos hacer frente a esta responsabilidad de conservar el empleo".

A ese respecto, Ramos ha querido subrayar que hasta ahora "se ha contenido la destrucción de empleo en las administraciones públicas, que el Gobierno de Canarias está haciendo un esfuerzo por no destruir empleo público, y está haciendo un llamamiento a cabildos y ayuntamientos" para que hagan lo mismo.

Algo que les han instado a hacer, según ha recordado, aplicando "medidas de reducción de salarios, o de reducción de jornadas y, proporcionalmente, reducción de salarios, para evitar destrucción de empleo público".