La presidenta del PP tinerfeño, Cristina Tavío, aboga por la supresión del escalón autonómico de la Administración y la creación de un gobierno de transición integrado por los siete cabildos y un equipo técnico "antes de que Europa nos lo imponga".

Tavío entiende su propuesta como en clave de "regeneración institucional, de replanteamiento, una reconstrucción, una redefinición de la organización político- administrativa de Canarias".

La dirigente popular defiende que la "única" manera de eliminar la "maraña" administrativa que "ahoga" a los canarios es renunciar a un escalón institucional "antes de que Europa nos lo imponga". Por ello, apunta, hay que abrir un debate "serio" al respecto que evitaría "muchos recortes injustos".

En concreto, la propuesta consiste en "liquidar" la Administración autonómica a favor de cabildos y ayuntamientos e iniciar un proceso de transferencia de funcionarios y recursos económicos a las corporaciones locales. "Sería la forma de que realmente Canarias haga un ejercicio de competitividad", añade.

Tavío explica que se trata de un gobierno "de transición" que prepare una "descentralización" ante la necesidad "urgente" y la "emergencia" de la situación actual. Estaría formado por los siete presidentes de los cabildos y un equipo técnico mediante la "liquidación" de la Comunidad autónoma a favor de las corporaciones locales.

"Debemos abrir con urgencia un debate serio porque esto no es una frivolidad. Al contrario, cuanto antes descentralicemos y abramos este proceso de transferencia de recursos humanos y funcionarios a favor de los cabildos, antes habrá dinero para todo y es la forma de no tener que cerrar hospitales ni colegios", asegura Tavío.

La dirigente popular descarta que con esta propuesta se corra el riesgo de que Canarias deje de ser una región y se convierta en siete islas separadas porque implica la formación "de un solo gobierno", aunque esté integrado por los siete cabildos. "Durante los tres años que quedan de legislatura habría que abrir este proceso de liquidación y transferencia", insiste.

En su día, recuerda Tavío, el Estado transfirió "muchas" competencias a las regiones, "pero desgraciadamente la comunidad autónoma se ha vuelto centralista y hay que abrir un proceso de descentralización, lo que significa que hay que arbitrar un gobierno en común de los siete cabildos que no implique triplicidades administrativas", argumenta antes de dejar claro que la necesidad de arbitrar un sistema de coordinación de las corporaciones insulares -que se reunirían cada seis meses- no implica crear un nuevo estamento institucional.

"Tenemos que ser valientes y le ha tocado a mi generación alumbrar el futuro inmediato. Está claro que la Administración se nos ha ido de las manos al engordarse todas", afirmó Tavío.