La comisión autonómica de Protección Civil ha aprobado el plan de emergencia municipal de Los Llanos de Aridane, el primero de un municipio de La Palma que ha sido homologado por la Dirección General de Seguridad del Gobierno de Canarias. Tras su aprobación el plan ya es operativo, con medidas concretas para actuar en caso de producirse una situación de alerta natural o antrópica (causada por el hombre).

El plan, dividido por capítulos, evalúa y previene posibles riesgos que podrían afectar a la población de Los Llanos, la mayor de la Isla, especialmente en lo que se refiere a las posibles crecidas de barrancos. Y es que ese es el riesgo natural más destacado que soporta el casco urbano del municipio, en el que habitan unas 15.000 personas (de las 22.000 que tiene toda la localidad) y por el que cruzan dos cauces parcialmente taponados, el de Tenisca y el de la Teja.

El ranquin de riesgos se establece, entre otras cuestiones, en base a antecedentes históricos. Así, se recoge con un "riesgo muy alto" las inundaciones provocadas por las lluvias, debido a la progresiva ocupación con edificaciones de los barrancos que cruzan el casco urbano. Se calcula, en base a esos datos históricos, que las inundaciones por lluvias torrenciales alcanzan un índice de 15 sobre 20 en la escala de riesgos y situaciones de emergencia.

El registro de datos se remonta hasta el siglo XVIII. Según consta en el mismo, "en noviembre 1774 se data el primer registro de una inundación de calado provocada por el barranco de Tenisca, que puso en peligro a Tazacorte (por entonces un pago de Los Llanos) y generó daños en la Ermita de San Miguel y a los ingenios azucareros". A partir de ahí se recogen múltiples incidentes parecidos: en noviembre de 1927 nuevo desbordamiento que causa daños en la Central Eléctrica de Argual, en marzo de 1931 se repite, en 1950 una crecida del Barranco de la Teja ocupó los márgenes de lo que hoy se conoce como "Pueblo Nuevo", en enero de 1957 de nuevo el Barranco Tenisca se introduce en el casco por el margen derecho y en febrero de 2008 una tormenta produjo una inundación en Argual.

En ese sentido, el plan obliga a adoptar medidas preventivas, entre las que se encuentra la evaluación de los drenajes, regularización de edificaciones en barrancos, limpieza de cauces o una cartografía de las inundaciones históricas.

A este riesgo principal se unen otros de menor valoración, pero que llaman la atención por su peligrosidad, como pudiera ser una posible explosión o incendio en una de las tres gasolineras que hay dentro del casco, así como un probable fallo en un gran embalse (Dos Pinos y Cuatro Caminos se sitúan a una cota superior de barrios como La Laguna o Puerto de Naos). En un tercer escalón están las erupciones volcánicas.