El Ministerio de Economía anunció en la noche de ayer que nacionalizará el 100% del Banco Financiero y de Ahorros (BFA), con lo que controlará el 45% de su filial cotizada Bankia. El departamento que dirige Luis de Guindos explicó que, a petición del desde ayer nuevo presidente del grupo, José Ignacio Goirigolzarri, va a impulsar los trámites para convertir en acciones el préstamo de 4.465 millones que concedió el Estado al grupo a finales de 2008, vía Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y aportará el capital "estrictamente necesario" para su saneamiento.

Economía argumenta que la conversión de la ayuda del Estado se hace porque se cree "improbable, a la vista de la situación de la entidad y de su grupo", que pueda devolver en 5 años el dinero recibido.

Así que, a tenor de esta consideración, al Estado le corresponde requerir que la ayuda prestada se convierta en una participación, que en este caso supone la nacionalización del grupo y la toma de control de Bankia.

No obstante, esto no supone la intervención de la entidad, reitera Economía, sino "un primer paso necesario para garantizar la solvencia, la tranquilidad de los depositantes y disipar las dudas de los mercados sobre las necesidades de capital de la entidad".

Ningún acreedor del grupo, incluidos los depositantes y titulares de participaciones preferentes, se verá perjudicado por esta decisión, subraya el comunicado.

Economía destaca que a partir de ahora el nuevo equipo gestor de Bankia, presidido por José Ignacio Goirigolzarri, tendrá que presentar al Banco de España su plan de reestructuración, viabilidad y mejora de gobierno corporativo.

El Gobierno está convencido de que Bankia, con 10 millones de clientes y más de 400.000 accionistas, aprovechará su potencial para continuar jugando un papel primordial en el sector bancario español. La propuesta de Goirigolzarri de que el Estado se convierta en el principal accionista de Bankia fue aprobada por unanimidad por el consejo de administración de BFA, según explicó la entidad en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El presidente Mariano Rajoy envió ayer, desde Oporto, un "mensaje de tranquilidad" a los clientes de Bankia y aseguró que el Ejecutivo garantizará la "estabilidad" del sistema financiero.

Por su parte, la Comisión Europea, a través de su vicepresidente, Joaquín Almunia, avaló la operación. Antes de asumir ayer la presidencia de BFA, Goirigolzarri fue nombrado titular de Bankia y declaró que asumía el cargo con el reto de hacer la entidad "más fuerte, rentable y potente".

El relevo de Rodrigo Rato por Goirigolzarri como máximo responsable de la entidad se produce en un momento complicado para la misma, ya que, por su alta exposición al sector inmobiliario, su morosidad y tamaño se calcula que podría necesitar un apoyo público de unos 7.000 millones.

Bankia saltó al parqué en julio de 2011 a un precio de 3,75 euros por acción, con lo que su capitalización superaba los 6.000 millones. Al cierre de la sesión de ayer, el valor de la acción era 2,130 euros y la capitalización se redujo a 4.247 millones.