José Juan Lemes está a punto de cumplimentar su primer año en solitario al frente de la corporación, en una etapa de dificultades económicas en la que ha tenido que afrontar duros recortes para hacer frente a las deudas y para que la actual crisis no implique más dificultades añadidas, como el despido del personal o dejar de prestar servicios básicos, algo que se mantiene y que forma parte de los objetivos, junto a la mejora de la recaudación.

Consciente de que él y su equipo representan otra forma de hacer política en Arafo, confiesa que padece "una especie de optimismo" que le hace ver las cosas con ilusión, por lo que remarca que, a pesar de todo, "Arafo está de moda".

¿Qué análisis hace de este mandato en solitario?

Ha sido una experiencia muy positiva, y considero que la renovación ha sido la clave del éxito. A pesar de las circunstancias económicas o del plan de ajuste para el pago a proveedores, aprobado por 3,3 millones de euros, o lo delicado de la situación, no hemos perdido la ilusión ni las ganas. Hemos mantenido la atención de uno de nuestros pilares básicos, como son los servicios sociales, alimentando su partida a través de una modificación de crédito.

Pero ha habido recortes que han afectado más.

Otro de los pilares afectados ha sido la seguridad, ya que lamento que de las cuatro plazas de policía que se crearían, solo se ha cubierto una por un procedimiento de traslado, mientras que las tres restantes se congelarán. Es la medida dentro del plan de ajuste que más nos ha dolido, pero no queríamos realizar un Expediente de Regulación de Empleo. Por ello, a los trabajadores se les recortó en aspectos sociales.

¿Las medidas adoptadas garantizan que no se tenga que despedir a nadie?

La principal idea es que nadie tenga que irse al paro. Hemos podido pagar las nóminas y no tenemos ningún retraso, hasta ahora. La situación es muy compleja y mi gran obsesión es pagar los servicios, porque gran parte de la deuda que se ha tenido que asumir en el pago a proveedores era, precisamente, la basura y el agua.

¿Qué otras medidas le han dolido a la hora de recortar?

La subida del agua, en un porcentaje que representa unos 4 euros en una factura de un consumo normal. En este apartado esperamos que no haya tanta morosidad, puesto que en el último bimestre el 15% de la población no la pagó. Dentro de este segmento, seguro que hay gente que no la pueda pagar, pero contamos con mecanismos de ayuda. Otra gran medida ha sido regularizar el gasto del servicio de permanencia, que hasta ahora se cobraba a razón de 10 euros al mes por niño, cifra que debemos superar para equilibrarlo. Con el fin de que no se incremente mucho el precio para los usuarios, estamos barajando utilizar recursos propios o flexibilizar la ratios de monitores. También hemos subido el IBI, a pesar de que no pensábamos hacerlo. En el agua y el IBI, una vez que mejore la situación económica, buscaremos una compensación.

En materia de seguridad se ha implantado cierta sensación de inquietud, por la falta de efectivos de la Policía Local.

Hemos llegado a un acuerdo con la Policía Canaria, que prestará servicios tres días a la semana, además de la estrecha colaboración con la Guardia Civil de Güímar.

Pero la Policía Local cierra a las 21:00 horas.

Sí, eso ocurre entre semana, pero los fines de semana y días especiales se hacen servicios especiales. Aunque no hemos podido realizar la idea de los servicios nocturnos, al no poder incorporar a los tres agentes nuevos, no la hemos desechado. Sin embargo, queremos implementar los servicios, con los efectivos que hay y los medios con que cuenta, que son suficientes, incluso, para realizar servicios nocturnos puntuales.

La oposición ha dicho que el PP ha incrementado la deuda municipal desde principios de mandato.

Uno de nuestros grandes objetivos ha sido pagar. Para ello hemos aprobado un plan para liquidar con proveedores 3,3 millones y se está pagando puntualmente otros 3 millones que se pidieron en 2009, que se terminarán en 2015, por lo que a partir de ese año estaremos más desahogados y nos recuperaremos. Decir que hemos creado más deuda es algo que requiere de más rigor y datos, porque cogimos el ayuntamiento con una deuda importante, pero se ha visto reducida con el trabajo realizado en la contención del gasto. Ahora tenemos la posibilidad de empezar de nuevo, al ponernos al día en el pago a proveedores. La deuda del presente año es de 400.000 euros, de la que gran parte es por el impago de la basura, que representa 31.000 euros mensuales.

¿Cuál es la situación del sector comercial y empresarial?

Contamos con más de un centenar de empresas en la zona comercial abierta, a las que apoyamos y en breve se abrirán otras tres. En el polígono industrial hay cinco nuevas empresas en proceso de instalación, dedicadas a distintos sectores, además de nuevos proyectos que se irán implantando en breve.

Precisamente sobre el polígono, Arafo ha planteado que sufre un tratamiento desigual, por el que pedía un cambio de condiciones.

Cambio que no ha prosperado porque los otros ayuntamientos y la junta de compensación se mantienen en el convenio inicial, que reflejaba un reparto a partes iguales, a pesar de que la mayor superficie es de Arafo, lo que implica que el gasto de mantenimiento sea mayor. Entiendo que si el ayuntamiento no está a las maduras va a estar a las verdes.

Usted ha sustituido a un alcalde que estuvo en este ayuntamiento más de tres décadas, ¿ha sido muy difícil la transición?

Domingo Calzadilla ha sido un magnífico alcalde que hizo mucho por Arafo. Sin embargo, ahora se hace otro tipo de política totalmente diferente. Ahora hay buena política de la que me siento orgulloso, y es la de la política en equipo, que es el caso del mío, no me canso de decir buenas palabras, pues a pesar de su juventud e inexperiencia, esta plagado de personas muy trabajadoras. Todos los días, a las 08:00 horas, todos estamos sentados sabiendo lo que se cuece en el ayuntamiento y opinando. Cualquier decisión, por trascendental que sea, siempre la comparto. Es una política más moderna y que el pueblo demanda.

¿En qué punto se encuentra el PGO?

Los contactos con la Consejería de Política Territorial son constantes, y nuestra última propuesta es que antes de verano tenga lugar una exposición pública coincidiendo con la aprobación inicial de este planeamiento urbanístico. Queremos que se produzca un trato directo y una transparencia con los vecinos.