El base Rajon Rondo confirmó que se ha convertido en el sustituto del escolta Ray Allen dentro de la nueva versión de los "Big Three" de los Celtics de Boston que vencieron a domicilio 91-107 a los Sixers de Filadelfia en el tercer partido de la semifinales de la Conferencia Este.

La victoria permitió a los Celtics recuperar la ventaja de campo y ponerse por delante (2-1) en la serie que disputan al mejor de siete partidos.

El cuarto encuentro se jugará el viernes en el mismo escenario del Wells Fargo Center de Filadelfia.

Esta vez no hubo falta personal decisiva del ala-pívot Kevin Garnett en los últimos segundos del partido como sucedido en el anterior encuentro. Todo lo contrario, Garnett dio una exhibición de buen juego que le permitió imponer su presencia bajo los aros.

Garnett aportó un doble-doble de 27 puntos, incluidos 13 en el segundo cuarto que fue cuando se rompió el partido a favor de los Sixers, 13 rebotes y repartió cuatro asistencias.

El veterano jugador, que sigue como número cinco del equipo, se mostró dominante durante todo el partido y además tuvo el apoyo de Rondo, que confirmó su condición de líder en la dirección del juego al aportar también un doble-doble de 23 puntos, 14 asistencias y seis rebotes.

Pero faltaba que el alero Paul Pierce, más recuperado de las molestias de ligamentos que sufre en la rodilla izquierda, se sintiese seguro de nuevo a la hora de tirar a canasta y destacó también con otro doble-doble de 24 puntos y 12 rebotes, que dejaron sin respuesta a los Sixers.

Pierce, que en los dos primeros partidos se combinó con una aportación de 21 puntos y no pudo ser el revulsivo que el equipo necesitó en la competición de la fase final, esta vez sí respondió a su condición de líder encestador y mostró que todavía tiene poder en sus piernas.

Los Celtics, que ganaron el cuarto partido consecutivo de fase final en Filadelfia, se convirtieron en el primer equipo que logró la victoria con un margen de puntos de dobles dígitos, después de que los dos primeros se decidieron por la diferencia de un sólo tanto.

El partido no tuvo más historia que ver como Garnett en el segundo cuarto comenzó la exhibición encestadora que permitió a los Celtics cambiar una desventaja de siete puntos (35-28) en el marcador por una ventaja de 13 (43-56) e irse al descanso con parcial de 49-60.

Los Celtics volvieron a acallar los comentarios sobre su condición de equipo demasiado cansado y mayor para enfrentarse al poder físico y rapidez de los Sixers.

"No tenemos problemas con lo que puedan pensar de nosotros, sabemos lo que podemos hacer en el campo, la experiencia que poseemos y como encontrar la forma de ganar partidos", declaró Garnett. "Este era un partido muy importante para nosotros y conseguimos el objetivo de la victoria".

El escolta-alero francés Mickael Pietrus, que anotó 13 puntos, se convirtió en la sorpresa de los Celtics, que también tuvieron el apoyo del ala-pívot Brandon Bass con 10 tantos que lo dejaron como el quinto jugador del equipo que logró dobles dígitos.

Los Celtics como equipo tuvieron un 52 por ciento de acierto en los tiros de campo (40-77) y el 46 (5-11) de triples, comparados al 41 (33-81) y al 53 (8-15), respectivamente, de los Sixers, que perdieron la batalla bajo los aros al capturar 37 rebotes por 44 del equipo de Boston.

El alero reserva Thaddeus Young anotó 22 puntos y encabezó una lista de cinco jugadores de los Sixers que tuvieron dobles dígitos, incluido el base Jrue Holiday, que aportó 15 tantos.

Mientras que los reservas, el escolta Lou Williams y el base Jodie Meeks aportaron 13 puntos cada uno, pero el ala-pívot Elton Brand, el pívot Spencer Hawes y el alero Evan Turner se combinaron con sólo 11 tantos.

El alero Andre Iguodala, que en el segundo partido fue una de las claves del triunfo de los Sixers, esta vez se quedó con sólo 10 puntos.

Los seguidores de los Sixers, con seis minutos para concluir el partido y parcial perdedor de 76-101, comenzaron a salir del campo.