Ochenta y dos daneses "chascando" queso asado, dorada a la plancha y una deliciosa ensalada de lomo con trozos de pera, nueces y miel de palma...

El nuevo restaurante Jamón Jamón, del aparthotel Atlantic Holiday Center -situado en Callao Salvaje, en Costa Adeje- ha quitado las papas fritas de la carta para ofrecer un menú degustación alejado de la típica comida del sector turístico, que ha sido sustituida por una suculenta mezcla de toques canarios, castellanos y mediterráneos.

La comida nórdica y platos genéricos quedan eliminados: el espaghetti boloñesa es exclusivamente para los niños.

"Nuestra experiencia nos demuestra que la demanda del todo incluido ha bajado", dice la gerente, Charlotte Abildtrup, danesa y residente en Tenerife desde hace 19 años.

"El All-inclusive se considera ya anticuado y por eso queríamos apostar por una comida sana, rica y con toques canarios -además también ecológica en la medida posible- para nuestros clientes, con el fin de que se lleven algo más que sol y playa", explica.

El aparthotel Atlantic Holiday Center, que al principio era un centro de reconvalecencia, fue construido a finales de los años sesenta, y fue uno de los primeros hoteles en Costa Adeje. Ahora es un aparthotel de 98 apartamentos y el dueño es una fundación danesa.

En invierno domina la clientela danesa, que ahora, además de saborear lo canario, puede sumergir los pies en arena suave y negra de la nueva playa de Costa Adeje, Playa Ajabo.

La Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar aportó los 1,8 millones de euros y la constructora Corsan-Corvian Construcción realizó la obra costera, que precisamente fue inaugurada ayer.

Playa Ajabo es una zona de baño pequeña de 250 metros de largo pero bien bonita y con una arquitectura acorde con el entorno natural, que lleva a pensar más bien en una playa desierta de La Gomera.

Sin duda será una gran ventaja para el pueblo, sus restaurantes, bares y tiendas -y para el puñado de hoteles situados allí, entre ellos El Atlantic-.

Con la nueva playa y la nueva línea de cocina -no olvidando la recién y muy elegante remodelación de las habitaciones- el hotel ha renacido.

Según el personal, en su mayoría canario, la clientela ha asumido el reto degustativo muy bien y solo de vez en cuando añora un plato único en lugar de tapas.

El paladar danés ahora se deja sorprender de componentes nuevos como el queso canario, jamón serrano, papaya y jugo de naranja natural para el desayuno; gazpacho, croquetas y un postre de piña herreña natural para el almuerzo; también se ofrece la tradicional costumbre del picoteo con especialidades como pulpo a la gallega, cogollos, chopitos y albóndigas a la hora de cenar.

De esa manera -y con el debido cariño canario- se somete a todos los "vikingos" a una experiencia culinaria que les exige abrir los ojos, mientras disfrutan de los últimos rayos del sol antes de que se esconda allí, detrás de la isla vecina.