El director argentino Gonzalo Tobal aspira a la Cámara de Oro en el Festival de Cannes a la mejor ópera prima con el filme "Villegas", una cinta en la que el realizador ofrece una visión personal del mundo rural de su país.

"Argentina es un país que vive del campo, es un gran productor agropecuario", recordó Tobal en una entrevista en la que destacó que de las películas hechas allá no se ha mostrado mucho "el campo productivo".

La localización del filme en General Villegas, en la esquina noroeste de la provincia de Buenos Aires, fue sin embargo fruto de la casualidad, como explicó el joven director (Buenos Aires, 1981), puesto que el proyecto de la película, explicó, "surge de varios lugares, no de una idea de una historia sino que en primer lugar hubo como un atractivo por el lugar".

"Llegué ahí por casualidad volviendo de un viaje con un amigo muy cercano que tiene familia ahí y paramos para dormir en casa de los tíos de él y ahí nos quedamos dos días, en los que conocí un poco ese lugar y varios de los espacios que después filmaría para la película", rememoró Tobal.

"Por otro lado los actores fueron el otro disparador. Yo quería trabajar con ellos, venía pensando en algo para trabajar con ellos dos", comentó en relación con Esteban Lamothe y Esteban Bigliardi, que encarnan a dos primos que viajan desde Buenos Aires a Villegas para asistir al entierro del abuelo y con los que rodó anteriormente.

La historia tiene que ver además con una vivencia del director, que conoció el fallecimiento de su abuelo cuando estaba en París y no pudo trasladarse inmediatamente a Argentina.

"No pude volver, me quedé un par de semanas más y ahí, en esa movilización surgió la idea estructural de una película de un viaje para ir a un entierro", comentó.

"Villegas" cuenta la historia de ese viaje de los dos primos, muy cercanos en la infancia pero que, ya alrededor de la treintena, han recorrido caminos vitales diferentes que temporalmente les sitúan en la confrontación.

La película es el resultado por lo tanto de la combinación de "una serie de materiales que ya me atraían", dijo el director, que ha realizado los cortos "Cerrar la tapa", "Álbum familiar en cuatro entregas", "Ahora todos parecen contentos" y "Cynthia todavía tiene las llaves", premiado este último en la Semana de la Crítica de Cannes en 2010.

Este primer largometraje trata además una cierta crisis de la treintena, la de los protagonistas: "sí, seguro que hay algo de eso, también en una generación y en un entorno social" en el que el fin de la juventud se alcanzaba sobre "la treintena", aseguró Tobal.

"La película trata de un fin de la juventud o un último encuentro con la juventud, pero tardía", agregó.

Además de los dos actores protagonistas, el filme cuenta con la colaboración de solo algunos profesionales, puesto que gran parte del elenco son actores aficionados del propio Villegas.

"Hicimos ''cásting'' en Villegas porque yo también quería, en la medida de lo posible, trabajar con gente de allí. No quería llevar a actores de Buenos Aires", explicó el realizador.

El Festival de Cannes termina en esta ciudad de la Costa Azul francesa el próximo 27 de mayo, día en que se darán a conocer los galardones y el realizador que obtiene en esta edición la Cámara de Oro, galardón que en 2011 cosechó la película argentina "Las Acacias", de Pablo Giorgelli.