Jaime Montalvo, designado por el Gobierno para llevar a cabo el arbitraje en el conflicto entre Iberia y sus pilotos, dictará mañana el laudo de obligado cumplimiento para ambas partes, ha anunciado hoy la ministra de Fomento Ana Pastor.

"Lo que decida el árbitro es fuerza de ley y, por lo tanto, yo estaré a lo que él diga", ha señalado Pastor en una entrevista en la cadena Cope.

La ministra no ha dado más detalles sobre cómo se anunciará el laudo, ya que todo dependerá del árbitro, que al final dará a conocer su decisión en el plazo previsto en la prorroga de diez días que ha solicitado a Fomento por la complejidad e importancia del conflicto.

Pastor ha explicado que el conflicto entre Iberia y el sindicato de pilotos Sepla es un problema, porque estaba repercutiendo en la calidad del transporte de los ciudadanos.

Aunque "dije siempre que no me gustaba un arbitraje forzoso", dada la continuidad de la huelga y el hecho de que no había manera de que hubiera un entendimiento voluntario, se decidió recurrir a esta medida que "es lo que menos me gusta de este mundo", ha insistido la ministra.

El arbitraje obligatorio fue acordado por el Consejo de Ministros del 27 de abril, y la figura del catedrático de Derecho del Trabajo y expresidente del Consejo Económico y Social (CES) elegida por Fomento fue aceptada por ambas partes el 29 de abril.

Tras el anuncio del Gobierno sobre el arbitraje y 18 jornadas de huelga que secundaban desde diciembre los pilotos, el Sepla desconvocó los paros que tenían previsto llevar a cabo hasta el próximo 20 de julio (todos los lunes y viernes).

Cuando se cumplía el primer plazo con el que contaba inicialmente Montalvo, éste solicitó, el pasado 8 de mayo, una prórroga de diez días para emitir su dictamen.

Se espera, pues, que el laudo que dictará mañana ponga fin a las discrepancias entre Iberia y sus pilotos, tras dos años y medio de una negociación frustrada del nuevo convenio colectivo, a lo que se ha sumado el rechazo por parte del Sepla de la nueva filial de bajo coste, Iberia Express, creada fuera de la compañía y que inició sus operaciones el pasado 25 de marzo.

Ambas partes tendrán que acatar el laudo que mañana revelará qué aspectos regulará: sólo los del ámbito de operación de Iberia Express o también los del convenio colectivo en vigor de los pilotos, que no fue la causa directa de los paros.