El sindicato de técnicos de Hacienda Gestha señaló ayer que la creación de un nuevo tramo en el rango superior del Impuesto de Sociedades lograría aumentar los ingresos fiscales en Canarias en 458 millones de euros al año, lo que casi multiplica por cuatro los 124 millones que se ingresarían en las Islas con la subida de dos puntos en el IGIC anunciada por el Gobierno autónomo.

Según indicó Gestha en un comunicado, la partida "más equitativa" para asegurar el cumplimiento del déficit estatal del 3% del Producto Interior Bruto comprometido para 2013 sería aprobar un nuevo tipo impositivo del 35% en el Impuesto de Sociedades para bases imponibles a partir del millón de euros de facturación, que son declaradas sobre todo por grandes empresas cuyas ventas superan los 45 millones.

Esta única medida supondría una recaudación de 13.943 millones de euros adicionales en el conjunto del Estado durante el próximo año, frente a los 5.811 millones que aportaría elevar dos puntos el IVA.

Además, esta alternativa "mejoraría la igualdad del sistema fiscal al reducir las diferencias entre el menor tipo efectivo de las grandes corporaciones y el mayor de microempresas y pymes", argumentó Gestha.

Medida "injusta"

La práctica totalidad del aumento del Impuesto de Sociedades se podría recaudar ya en 2013 a través de los pagos a cuenta, lo que afectaría únicamente a 5.740 corporaciones y multinacionales, añadió el sindicato. Esta medida contrasta con una hipotética subida del IVA, que afectaría a todos los ciudadanos y a todas las empresas, independientemente del estado de sus cuentas.

Gestha justifica esta alternativa en que el esfuerzo fiscal de las familias a cuenta del IVA y el IRPF se sitúa ya entre el 13% y el 38,2%, y el de las empresas entre el 18% y el 25%.

Para el colectivo, una nueva subida del IVA o la anunciada del IGIC sería "injusta" y "regresiva", ya que afectaría a todos los ciudadanos por igual, sin atención a su renta. Concretó que la medida perjudicaría especialmente a los pensionistas y a la población "mileurista", que representa más del 60% de los asalariados y autónomos y que dedica la mayoría de sus ingresos al consumo.

En su opinión, cualquier subida del IVA es "desaconsejable" mientras no se recupere la economía, ya que actúa como desincentivo del consumo. Elevar el tipo general al 20% significa pagar en impuestos una quinta parte del precio en el 87% de las compras, sin contar tasas adicionales.