La creación de videojuegos en Canarias ha sido hasta hace poco una actividad anecdótica. En el inicio de la segunda década del siglo XXI ha quedado atrás la financiación pública que permitía crear proyectos puntuales orientados a la educación. Una nueva generación de creadores digitales ha participado en una encuesta en la que se ha respondido a cómo se iniciaron, qué es necesario para empezar, sus expectativas de futuro y qué carencias encuentran en el Archipiélago.
Si hay una palabra que comparten todos los encuestados en las motivaciones que los llevaron a crear juegos es "pasión". Luis Antón, cofundador de Medusa y primer creador de un videojuego para iPhone en Canarias, lo resumía de la siguiente forma: "Pura pasión. Los juegos los hacía como hobby y lo sigo considerando así, solo que ahora, además, están a la venta". Saben que están trabajando en un mercado que crece cuando el resto está en crisis. Airam Rodríguez es socio de Tropical Games, una empresa que aplica una visión global que va más allá de la programación y diseño del juego. Considera que "las perspectivas son muy buenas, pero hay que trabajar todas las oportunidades de negocio y tener una buena y rápida ejecución del proyecto. Sobre todo el marquetin y la parte comercial, que es prácticamente el 80% del éxito".
A pesar de la juventud en esta actividad -la mayoría no llega a dos años de vida- y su vocación pasional, tienen una visión empresarial en la que son conscientes de las dificultades a las que se enfrentan. "Lo importante es ser realistas con lo que podemos hacer y el dinero que podemos conseguir y ajustar nuestro primer lanzamiento a esos factores, destaca Jennifer Vela, responsable de internacionalización en la empresa Geosophic que nació gracias al videojuego social FeudalSquare. En el resultado de la encuesta se manifiesta que reconocen que conseguir resultados en el sector privado no será sencillo. "Nos encontramos en un momento en el que es muy fácil la distribución de los juegos. Por eso también es muy difícil monetizar. Sobreviven los mejores, o los que sepan llegar mejor al usuario final", reflexiona Isidro Quintana, director de Promineo Studios.
Talento e inversión
Una de las principales ventajas es la escasa inversión económica necesaria para empezar. Casi todos coinciden en que un ordenador es suficiente. Reconocen que es casi imposible encontrar inversores en Canarias que entiendan este negocio y que por ese motivo optan en trabajar más allá de las islas, e incluso del país. En general demandan mayor atención de las administraciones públicas aunque todas las empresas encuestadas han conseguido algún premio en metálico inicial gracias a los programas de emprendeduría e innovación de las diferentes administraciones públicas Canarias.
Más importante que el capital económico inicial es la cualificación técnica. Todos desarrollan sus creaciones para más de una plataforma móvil como Android o iPhone, e incluso para ordenadores de sobremesa o videoconsolas. La formación se convierte en pieza clave. Carina González, directora del Máster de Creación de Videojuegos de la ULL lo resume: "Se ha incrementado la demanda de empresas que necesitan este tipo de profesionales especializados, pero no en la de los estudiantes que demanden esta formación. Quizás por que no son conscientes del potencial que tiene este mercado de trabajo".
Tropical Games, la factoría de juegos
Es la apuesta más seria de fábrica de juegos con visión global. “No sólo hay que tener ideas, hay que saber ejecutarlas, utilizar canales idóneos de distribución y un márquetin apropiado. Es un negocio como cualquier otro donde el mercado al que nos dirigimos es global. EE.UU. y China son nuestros principales mercados”, indica Airam Rodríguez.
Promineo, juegos que venden mejor
Pasarlo bien jugando es una buena forma de crear un mensaje positivo sobre un producto. “Conseguir algunos comportamientos es lo que nos diferencia y en lo que de verdad estamos preocupados en nuestras creaciones. Lo hacemos para aumentar el engagement, la fidelización del usuario, o reforzar los productos y marcas”, afirma Isidro Quintana.
Geosophic, dime dónde juegas
Casi todos los dispositivos móviles permiten localizar geográficamente a quién lo usa. Esta información permite conocer mejor al internauta. “Hay que tener en cuenta que los usuarios de estos dispositivos pasan casi el 25% de su tiempo jugando, por lo que hay una gran demanda de aplicaciones adaptadas a este formato”, destacó Jennifer Vela.
Medusa, el arte hecho videojuego
Oferta servicios de arte y programas que les permiten obtener ingresos suficientes para poder crear obras con una estética muy cuidada. “Es necesario reunir muchas habilidades y conocimientos. Bien en una única persona, bien en un grupo. Se necesita programación, ilustración, modelado, animación y algo de psicología”, detalla Luis Antón.
4D3, estudio de animación canario
Sus trabajos en animación y 3D requieren una inversión inicial superior a la de un PC convencional. Detectaron el cambio de tendencia hace años. “En ese momento planteamos un plan I+D y conseguimos la subvención para el tecnólogo en un proyecto de 3 años. Así iniciamos nuestros servicios de Interactive Media”, recalca Marcos Martín.
ULL y el máster de videojuegos
La Universidad de La Laguna y la Universitat Oberta de Catalunya inician en octubre la tercera edición de su Máster Universitario en Creación de Videojuegos, creaciondevideojuegos.com. “En ediciones anteriores se han sumado responsables de estudios de mercado, diseñadores, gente de sonido, narrativa, accesibilidad..”, informa Carina González.