LA SEMANA pasada se inauguró un nuevo equipamiento social para la atención de personas en exclusión social en Santa Cruz de Tenerife. El antiguo Albergue Municipal, hoy Centro de Acogida Municipal, ha sido renovado con unas nuevas instalaciones para dar cobertura a necesidades básicas como aseo personal, consigna, ropero, comedor, cocina...

Y es que en tiempos de gran vulnerabilidad social como los que atravesamos cualquier persona es susceptible de caer en procesos de exclusión. La soledad, la marginación, las drogodependencias, el desempleo o la ausencia de redes familiares y sociales son solo algunos de los factores que provocan situaciones de marginación y empobrecimiento, y que obligan a ser usuario/a de este tipo de recursos sociales, a los que acceden personas nacionales y extranjeras desde todos los lugares de nuestras islas.

No en vano, el Centro de Acogida Municipal de Santa Cruz es el único recurso de estas características que existe en la provincia tinerfeña. Los números hablan por sí solos. En el año 2011 fueron 1.066 las personas distintas que recurrieron al comedor social y 447 ocuparon las plazas de alojamiento nocturno.

Además, en el Centro de Día, 333 personas participaron en actividades y talleres para favorecer la inclusión social, que es la meta hacia la que debemos dirigirnos, de ahí que las nuevas instalaciones vayan orientadas a un nuevo modelo de atención social, un modelo que prioriza la intervención y los recursos para las personas más necesitadas. El presupuesto disponible se adapta y se ajusta a planes, programas y proyectos que ataquen las causas de la exclusión social poniendo el acento en la prevención.

En el área municipal de Atención Social del Ayuntamiento de Santa Cruz nos hemos propuesto que los usuarios y las usuarias de los servicios sociales sean protagonistas de un proceso de inclusión al que prestaremos todos los apoyos humanos y materiales que sean posibles, hasta conseguir que sea la persona la que, apoyándose en sus capacidades, mejore la situación en la que se encuentra.

Las prestaciones y las ayudas se vinculan a un proceso de intervención en el que las y los beneficiarios tienen que comprometerse con una actitud y unas acciones que lleven a la inclusión. Hablamos de una contraprestación, pues la ayuda solo es una herramienta del proceso, no un fin en sí misma; es un medio para la integración, en la que será fundamental el trabajo en red, consensuado con todas las fuerzas políticas, con las entidades públicas implicadas y también con el tercer sector.

La propuesta es crear una eficaz red de protección social que incluye asociaciones y ONG; que cuente con la iniciativa social, con el voluntariado y con la participación comunitaria. Debemos, además, modernizar y simplificar los procesos y los trámites administrativos, para ganar en rapidez en la concesión de prestaciones, pues una ayuda que llega tarde no es eficaz y se vuelve insuficiente ante un problema que se agrava con el paso del tiempo.

El Centro de Acogida Municipal, con sus nuevos equipamientos, es una dotación nuclear en esta renovada apuesta de intervención social, que se basa en la coordinación activa de todos los agentes sociales, así como una firme metodología de intervención, en la que primen el desarrollo y el empoderamiento de las personas en sus propios procesos de inserción, para conseguir mayor calidad de vida para todos y todas.

Ayuntamiento de Santa Cruz

de Tenerife