1.- Pues me parece muy mal, y lo digo como periodista pero también como socio del Real Casino (aunque deba dos cuotas que me devolvió Cajasiete), que , presidente de la entidad, haya pactado con Ángela Mena, de los Kirchner de El Sauzal, para organizarle un homenaje al extinto periodista Manolo Iglesias, en el propio casino, pero patrocinado por "Jalea de Menta", el restaurante de la propia Mena. Perdonen por el párrafo anterior, que me salió muy largo; pero no pienso rectificarlo. Hay una Academia de Gastronomía, a la que Manolo pertenecía, que sería la competente para organizar este homenaje gastronómico, no el restaurante de la Mena. ¿A cuenta de qué? Algunos socios del Real Casino me han llamado, indignados, despotricando contra la tal Mena y contra Pipo. Sigo diciendo que no pinta nada un negocio particular en un acto institucional de una sociedad como el viejo Casino de los Caballeros. Digo yo. Aunque, oiga, estoy dispuesto a escuchar opiniones.

2.- Cuando yo me muera no irá nadie a mi entierro, por dos motivos. Porque he echado para atrás a mucha gente de mi edad y me estoy quedando solo, una. Y, dos, porque me he convertido en un viejo carrucho, antipático. Dice un amigo mío, bueno, voy a decir quién es, Juan-Manuel García Ramos (al que hacía meses que no citaba y tomará buena nota de ello el farmacéutico "Tata" Padilla), que a él lo que le gusta ser en la vida es antipático. Y no le falta razón. El simpático mantiene una tendencia natural a convertirse en culichichi (mejor que culichiche). Y esto sí es verdad que no. Cuando se le pregunta al letrado Ángel Isidro Guimerá, amigo mío y a mucha honra, por la definición de culichichi, él siempre responde: "No existe definición; tú los ves por la calle".

3.- Bueno, pues dicho lo del Real Casino, comentaré que Juan-Manuel lleva doce folios escritos de su nueva novela "El zahorí del Valbanera", cuyo protagonista (y ahí he tenido una cierta participación) va a llamarse José Aquilino. Me pide mi amigo que haga las paces con Juanito Cruz; y me recrimina que siempre me meta con él; y añade que Juanito no me ha causado ningún mal. Yo no tengo nada contra Juan Cruz, que tampoco asistirá a mi entierro; y además leo todos sus artículos, incluidos los del "As" y los de "El País", en los que la ha cogido meona con Rajoy. Cada domingo le mete un viaje. Juan es un gran periodista. Y yo lo admiro mucho y lo sigo desde chico, que para eso somos paisanos, aunque él no quiera sino a Rafita Cobiella, quien a mí tampoco me dirige la palabra, aunque yo a él sí. Y que tampoco irá a mi entierro. Vaya desierto.

achaves@radioranilla.com