Manuel Olmedo, retirado hoy en series de 1.500 metros, anticipó que si no mejora sustancialmente su estado de forma en los próximos días renunciará a los Juegos Olímpicos de Londres porque ve que "este año las cosas no están saliendo".

"Este año está siendo difícil. He entrenado mucho y las cosas no están saliendo. Llevo unos días con dolores estomacales, pero tampoco quiero achacarlo a eso. Desde el principio no me he visto con fuerzas. He entrenado lo que he podido y un poco más, pero ni en Huelva ni aquí me voy encontrando", declaró a EFE.

El sevillano, cuarto en el Mundial del año pasado, lamentó haberse retirado. "La cosa se está complicando. Siento haberme retirado, pero las fuerzas no daban para más. No aguantaba 400 metros más. Estas semanas están siendo un sufrimiento, hacemos un entrenamiento bueno y otro malo. El año pasado era al revés. En cada entrenamiento sufro porque no me veo".

"Hay un mes para los Juegos", señaló, "pero si voy es porque puedo luchar por medalla o un puesto de finalista como mínimo, y ahora mismo estoy muy lejos de eso. Hay que ser sincero. Intentaré ir a algún mitin y correr rápido, pero si no tengo ninguna garantía, no iré".

Olmedo piensa que "hay que estar en una forma para hacer 3:30 o 3:31, como el año pasado, aunque no hiciera esas marcas". "Aquí he venido con la ilusión de coger ánimos para los Juegos y me he topado con una pared".

"En Semana Santa, a mi novia le dio un trombo en el pulmón, estuvo ingresada con bastante peligro y eso me afectó mucho en el entrenamiento, me costó mucho estrés y desde entonces he entrenado todo el volumen que he podido, pero no me encontrado con fuerzas", reveló.

"Todo se mezcla, el cambio de entrenamiento, un poco de osteopatía de pubis, pero bueno, si encuentro una marca de 3:33 sí que voy a los Juegos. En caso contrario no iré. Si voy, será porque tengo una garantía de que voy a quedar satisfecho", concluyó.