Las tasas universitarias se encarecerán el próximo curso en Canarias un 40 por ciento de media, salvo para los alumnos que aún estudian en los planes anteriores al Espacio Europeo de Educación Superior, a los que sólo se aplicará una subida equivalente al IPC previsto (1,9 %).

El Consejo Universitario de Canarias, compuesto por las dos universidades de las islas, sus respectivos consejos sociales y el Gobierno regional, ha acordado hoy por unanimidad la revisión de tasas que se aplicará el próximo curso, de acuerdo con los criterios impuestos a las comunidades autónomas por el Consejo de Ministros.

El vicepresidente regional y consejero de Educación, José Miguel Pérez (PSOE), ha recalcado que el Gobierno de Canarias está en desacuerdo con esta subida de tasas, porque la considera "onerosa" y "desproporcionada", pero también ha precisado cumplirá la ley, si bien acogiéndose a la franja mínima de subidas que esta dispone.

El Consejo Universitario de Canarias ha decidido, así, que las tasas que pagarán los alumnos que se matriculen en un grado en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria o en la de La Laguna pagarán el 15 por ciento del coste real de sus estudios (la ley obliga a cubrir entre el 15 y el 25 %), lo que en términos prácticos implica una subida de las matrículas del 40 por ciento, según ha reconocido el director general de Universidades, Carlos Guitián.

Sin embargo, el Gobierno canario cree haber encontrado un resquicio legal en el decreto ley -que solo habla de "grados"- para salvar de esa subida a casi cuatro de cada diez estudiantes de las universidades canarias; es decir, a aquellos que todavía cursan licenciaturas, diplomaturas y, en general, titulaciones no adaptadas al Plan Bolonia. Para ellos, la matrícula solo se encarecerá el 1,9 por ciento, la inflación prevista para este año.

El aumento del 1,9 por ciento también se aplicará en Canarias a los másteres, en este caso porque los precios de referencia marcados por el Gobierno central para los posgrados ofrecen al archipiélago margen para optar por una subida menor a que tendrán que establecer otras comunidades autónomas, ya que las tasas para este tipo de estudios en las islas eran hasta ahora superiores a la media.

Pérez ha subrayado que la decisión que ha tomado hoy el Consejo Universitario de Canarias permite a las universidades de Las Palmas de Gran Canaria y La Laguna contar con tasas entre las más bajas de España, haciendo menos onerosa la subida a las familias.

El vicepresidente de la comunidad autónoma ha expresado su temor a que el encarecimiento de los estudios dificulte a los estudiantes procedentes de familias con pocos recursos el acceso a la universidad, algo que el Gobierno canario intentará impedir, dentro de sus posibilidades, reorientando su política de becas.

Así, ha explicado que las becas que el Gobierno canario concede como complemento a las que otorga el Estado tendrán como prioridad el próximo curso, sobre cualquier otro criterio, la de evitar que un alumno que cumple con las exigencias académicas para estudiar una titulación renuncie a hacerlo por falta de recursos.

En ese objetivo se van a concentrar la mayor parte del presupuesto para becas del Gobierno canario, ha insistido Pérez.