Siempre he insistido, y me permito hacerlo una vez más, en la conveniencia de que los lectores de este periódico no deben dejar de leer en la página 2 la columna diaria en la que se nos dan noticias de hace 50 años. Suele ser un pozo de sorpresas y de ilustración de cómo éramos hace medio siglo. De la edición correspondiente al 24 de junio pasado tomé nota de la siguiente noticia futbolística, en este año 2012 en que ceñimos la triple corona y con un CD Tenerife en las catacumbas de la antigua 3ª División. La noticia, la última de las siete de la columna, dice así:

Triunfo del Tacoronte. Ayer por la tarde se disputó en el Estadio el partido de desempate para la promoción a primera categoría regional, entre el Tacoronte y el Güímar. Venció el equipo tacorontero por 3-0, pero el partido se suspendió a los 26 minutos del segundo tiempo por retirada colectiva del Güímar.

¿? Hacía siglos que no oía esta expresión, supongo que porque es una práctica abandonada en estos años de democracia que, como tales, debían de ser pródigos en resoluciones de este tipo. ¿Habría manera de saber cuándo fue la última retirada colectiva al menos en esta tierra nuestra? Algún aficionado lo agradecería, creo yo.

José Mª Segovia Cabrera

Nuevamente Pedrito como atracción turística

Sin ningún eco pertinente sobre nuestra sugerencia relacionada con el futbolista internacional más importante de toda la historia del fútbol tinerfeño, publicada en esta misma sección del periódico EL DIA, ni noticias de nuestra comunicación vía correo electrónico al Ayuntamiento de la Villa de Arico, volvemos a insistir hoy en el tema, ya que lo consideramos que cae de lleno dentro de la estrategia de innovación que necesita nuestra promoción turística, independientemente de la repercusión socioeconómica que la propuesta puede alcanzar.

Se trata de erigir un monumento en bronce de Pedro Rodríguez Ledesma -de tamaño natural con un balón en los pies- en el barrio de Abades del municipio citado.

Alrededor de esta obra podrá realizarse cualquier tipo de parque recreativo del ocio, con sus correspondientes establecimientos comerciales, que redundaría en creación de empleo, un movimiento económico que puede ser considerable, según la magnitud del proyecto, al cual se le puede dar considerables dimensiones.

Dada la afluencia turística que la isla tiene y la enorme proyección del fútbol a escala mundial, es fácil predecir que no faltarán cientos de personas que aprovecharán para tomarse la foto junto al monumento del prestigioso futbolista, así como para comprar algún singular recuerdo del mismo, que puede fácilmente comercializarse.

Tenerife tiene aquí un símbolo que ya quisieran tener para sí otros lugares, y que será un auténtico lugar de "peregrinación" del turismo que nos visita.

Independientemente de todo este aprovechamiento comercial que la isla puede darle a este singular personaje, es auténticamente justo que reclamemos para él este reconocimiento de su lugar de nacimiento, dada la enorme publicidad que ha supuesto su trayectoria deportiva, en la cual destaca, además de por sus virtudes deportivas, por su innegable humildad, su carisma y su honestidad. Todo un ejemplo para nuestra juventud, como bien dijera el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, en el acto de reconocimiento que le hiciera la isla cuando se proclamó campeón del mundo.

Es de justicia que a Pedrito se le dedique este monumento, puesto que ha alcanzado, a su corta edad, la cifra de dieciséis títulos nacionales e internacionales, en los cuales ha tenido una participación decisiva. Honrar honra.

Antonio Pedro Tejera Reyes