Esta es la breve historia de un grupo de delineantes de todas las comunidades autónomas que, aprovechando las redes sociales, nos hemos unido por una lucha: que se nos incluya como técnicos competentes en la actualización de la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE).
Por todos es sabido que uno de nuestros mayores problemas es el sistema educativo, con la Formación Profesional a la cabeza. Todos los partidos políticos se vanaglorian de querer incentivar la FP para acercarla a los niveles de aceptación que nos reclama Europa, donde la FP es la educación estrella y es mucho más demandada que los estudios universitarios. Este desequilibrio formativo no solo es un grave problema para nuestro sistema educativo y productivo, sino que es un problema que es incentivado por la propia Administración, que no aplica sus propias leyes relacionadas con la FP.
El grave problema de nuestra educación y de nuestro sistema productivo es conocido por los delineantes españoles, y por eso, ante esta enquistada situación, hemos decidido unirnos aprovechando las redes sociales para reclamar nuestra integración profesional en Europa. La falta de competencias profesionales reales ha fomentado la desafección profesional y la drástica disminución de la colegiación.
Tener un nivel competencial profesional inferior que el resto de delineantes europeos hace que aquí se nos considere meros "pinta-rayas" y se confunda nuestra profesión, delineante, con una de nuestras múltiples actividades, que es delinear. Nadie tiene en cuenta que cuando se realiza un proyecto de un edificio, de una vivienda, de un local comercial, en la mayoría de los casos el artífice de la existencia de ese proyecto es el delineante; en este país el delineante siempre está obligatoriamente oculto.
Nuestra formación es Educación Superior Europea y estamos igual o mejor preparados que la mayoría de nuestros homólogos europeos. Por ello se ha creado la plataforma Unión de Delineantes Técnicos Competentes, por un motivo claro y contundente: ser europeos.
No pretendemos ser arquitectos ni arquitectos técnicos ni ingenieros; estamos orgullosos de nuestra admirable profesión: delineante. Nuestro objetivo es claro: poder desarrollar en este país las competencias y cualificaciones profesionales para las que hemos sido formados, poder realizar de forma autónoma pequeños proyectos sencillos, proyectos de obras menores, cédulas de habitabilidad, licencias de actividades, certificaciones energéticas de edificaciones existentes, etc., siendo para ello necesario nuestra inclusión en la inminente actualización de la LOE.
Unión de Delineantes Técnicos Competentes
Europa ha fracasado
Y lo ha hecho principalmente porque se construyó con cimientos tan inestables como España, Grecia, Portugal e Irlanda, que la han resquebrajado por completo.
Pretender seguir, como parece ser la intención, con los mismos países que lo han hecho inviable sería un gran absurdo.
Ahora Rajoy, por todas partes, exclama "¡más Europa!, ¡más euro!", y lo que está queriendo decir es que en el futuro, de volver a producirse el mismo desastre que actualmente, los países serios europeos se encargarían de sacarle de la bancarrota. Comprendemos que Holanda y Finlandia hayan manifestado que no están dispuestos a pagar las deudas de otros países.
Si se quiere que Europa sea viable habría que empezar por ir paulatinamente librándose de esos países lastres que la han conducido al desastre económico actual. Sentémonos a recapitular. Seguro que hay materia gris suficiente para corregir lo mucho que se ha hecho mal. ¿Cuántos siglos lleva España sin un gobierno digno como merece ese noble pueblo español? Los españoles deberían aprender de esas naciones del norte de África, y, en lugar de pararse en la Puerta del Sol, dirigirse al Parlamento y Senado para acabar con esa oligarquía o casta que se instaló y sigue instalada en el poder tras la muerte del dictador. Todos los españoles claman por que los responsables de las bancarrotas de Bankia y cajas de ahorros sean llevados ante los tribunales. Podríamos exceptuar a los miembros del Partido Popular, que parece no estar muy interesados en que se haga justicia.
Antonio Artiles Megías