La producción de miel en Tenerife ha descendido en un 76 por ciento como consecuencia de la sequía registrada desde el invierno pasado, según informó hoy el director de la Casa de la Miel de la isla, Antonio Bentabol, quien dijo que los datos de los productores pueden ser incluso superiores.

Así lo manifestó Antonio Bentabol durante la presentación de las primeras mieles envasadas con la etiqueta que proclama la concesión de la Denominación de Origen protegida para este producto apícola.

Bentabol señaló que la "importante" sequía que padece la isla ha tenido "una traducción" considerable en la flora y prueba de ello es que otros años se procede a presentar las primeras fieles en mayo, y en esta ocasión ha sido a finales de julio.

"Es un mal año de producción pero los apicultores han hecho un esfuerzo" para presentar sus mieles en el mercado, dijo el director de la Casa de la Miel.

Como ejemplo citó el hecho de que la floración en el Parque Nacional del Teide ha sido "mala" este año y subrayó el esfuerzo que realiza un apicultor para trasladar a este paraje entre 50 y cien colmenas, para luego quizás obtener únicamente cien kilos de miel.

Ello llevaría además a vender la miel a precios exorbitantes pero los apicultores inicialmente no han repercutido esta mala cosecha en el coste al consumidor.