Alejandro Álvarez guarda reposo en su domicilio después de que el pasado lunes lo operaran de la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, en la Clínica La Colina. El futbolista del Tenerife B sabe lo que le espera, pues en la Liga 2009/2010, durante un partido de Segunda B del filial ante el CD Toledo, sufrió la misma lesión pero en la otra rodilla.

Por delante, cinco meses de rehabilitación antes de poder ejercitarse al mismo ritmo que sus compañeros y uno más para estar disponible para el técnico Quico de Diego. Dentro de lo que cabe, el lateral derecho asume con entereza este nuevo revés en su carrera deportiva y se anima con los nu-merosos mensajes de apoyo que ha recibido, entre otros de Quique Medina y "Sesé" Rivero, director deportivo y director del fútbol base del club, respectivamente, o de David Amaral. "Me han venido a ver compañeros del primer equipo, como Bruno o Josmar", cuenta un jugador que lleva doce campañas vinculado a la entidad tinerfeña.

Y tiene garantizada una más, ya que antes de ser operado firmó la renovación de su contrato. "En el club me dijeron que estuviera tranquilo con mi futuro cuando supieron cuál era el alcance de la le-sión", añadió agradecido a Medina y Rivero, así como a los profesionales de La Colina que realizaron la intervención quirúrgica.