La selección española de balonmano tratará se superar hoy el va-rapalo que supuso la derrota ante Dinamarca en los últimos segundos con un triunfo sobre Corea del Sur, que se antoja indispensable para certificar el pase a los cuartos de final del torneo .

El conjunto español podrá contar finalmente con Jorge Maqueda, tras la decisión de la Federación Internacional de Balonmano de dejar sin sanción la tarjeta roja con la que fue amonestado el lateral español en el duelo que enfrentó a España y Dinamarca.

Por contra, sigue siendo duda para el choque con los surcoreanos el portero Sterbik, que sufrió una elongación sin rotura en el gemelo de la pierna derecha en el debut de España en el torneo, para el choque con los surcoreanos.

Contratiempo que se une a la inusual hora a la que deberá competir el equipo español, las nueve y media de la mañana, que obligará a cambiar de manera radical la dinámica de trabajo de la selección, que tiene previsto levantarse a las seis de la mañana.

"Es cierto que es una hora a la que no estamos acostumbrados a jugar, pero es la que toca y no nos vamos a quejar. Así que habrá que madrugar y estar allí predispuestos a correr como van a correr ellos, porque el de mañana (por hoy) es un partido que debemos de ganar sí o sí, sino queremos que se nos compliquen las cosas", explicó Rivera.

No obstante, ni las bajas, ni el horario, serán las principales preocupaciones del técnico español, que destacó la dificultad que entrañará superar la agresiva defensa de los surcoreanos.

"Me espero un equipo que corre mucho, muy profundo en defensa y que ya puso las cosas muy difíciles a Hungría, por lo que tendremos que trabajar muy bien para encontrar soluciones a su agresiva defensa y a un portero que para raro, pero que para mucho", dijo.