La percepción de la oposición y del sindicato UGT es bien distinta, pero el gobierno local aseguró ayer que la primera jornada sin los servicios de la empresa Mararía en la ayuda a domicilio se desarrolló "sin incidentes" y de mejor manera de lo previsto. Según los datos del edil que ha asumido el área social en ausencia de José Manuel Arocha, el también socialista José Ángel Martín, la prestación llegó ayer a un total de 494 beneficiarios de aquellos que presentan las situaciones más severas y graves de dependencia por falta de otras ayudas o por minusvalías.

El IMAS confía en que, a finales de la próxima semana, se haya cubierto ya 700 expedientes, mientras que, el 20 de agosto, según Martín, se espera cubrir el 100% de los, como mínimo, 1.170 usuarios actuales. Sobre la cifra total, el gobierno matiza que algunos no cumplen con las condiciones de la ley de dependencia, mientras que UGT subraya que, el pasado julio, la ayuda llegó a 1.345, por lo que la cifra de personas desatendidas es mayor de la que sostiene el consistorio.

Martín también insistió ayer a EL DÍA en que todo apunta a que el gobierno apostará en el futuro por mantener el sistema aplicado desde ayer, consistente en que los beneficiarios elijan una de las trece empresas especializadas con las que trabaja la Comunidad y sin necesidad e sacar un nuevo concurso. Para ello, el ayuntamiento pretende ejercer de intermediario y aportar a las compañía el dinero que suponga cada caso, previa comprobación por parte de los técnicos de que el servicio se ha prestado debidamente.

El edil Julio Pérez defendió ayer a Arocha y el hecho de que no haya suspendido sus vacaciones en Turquía porque, según recalca, ha estado un año tratando de solucionar la situación y sigue en continuo contacto. El que sí ha aplazado su periodo de descanso es el alcalde.