Los gobierno municipales de la Isla y su personal de confianza se incorporan a las reducciones salariales impuestas a los funcionarios y al personal laboral por el Gobierno central que preside Mariano Rajoy. El sueldo mensual y, sobre todo, la paga extraordinaria de Navidad son las dos vías que se están viendo afectadas por esta criba económica que, en algunos casos, no va a suponer una reducción presupuestaria o ahorro para la administración correspondiente. ¿Por qué? Porque las autoridades han elegido la atención social para gastar aquello que los cargos públicos y los trabajadores puestos a dedo dejarán de percibir.

Muchos de los ayuntamientos no han aprobado formalmente todavía la aplicación de esos recortes, pero sí tienen muy avanzado el trámite y será en las próximas sesiones plenarias donde se dé el visto bueno a la reducción de los sueldos y a la suspensión del cobro de la extra navideña. Un ejemplo de ello es el gobierno que preside Fidela Velázquez (que no cobra del consistorio) en San Juan de la Rambla, que empleará ese dinero en "políticas sociales y proyectos para la contratación y desarrollo del empleo". Algo parecido harán en La Matanza, donde crearán un fondo común de atención social, lo mismo que en Adeje y El Rosario, entre otros lugares.

Quien va un poco más allá es el grupo gobernante de Los Silos, que tiene un 20% menos de salario que suma a la paga extraordinaria de Navidad.

La merma económica para los alcaldes y concejales, así como para los empleados elegidos por ellos como trabajadores de confianza, se cifra en un 7,1% sobre los emolumentos que tenían aprobados para este año.

Estas reducciones, en algunas situaciones, se suman a otras que se aplicaron desde el inicio del mandato actual, en junio del año 2011. En este caso se encuentra, por ejemplo, los gobierno locales de Güímar y de Arafo, Rafael Yanes y José Juan Lemes. El primero ya optó por recortar fuertemente los sueldos políticos en 2007 y lo repitió el año pasado; el segundo asumió la Alcaldía tras los últimos comicio municipales y el sablazo a la partida presupuestaria correspondiente a su sueldo alcanzó el 60% y el de los ediles liberados. El personal de confianza arafero no es ni mileurista.

La incógnita

Estas situaciones se contraponen con alguna otra que, al menos de momento, permanece inamovible. El gobierno municipal de Arona, presidido por José Alberto González Reverón, no ha hecho público que vaya a renunciar ni a la paga extraordinaria de Navidad ni a parte de su sueldo, a pesar de que este regente es uno de los mejor pagados de la Isla.

La conjugación del verbo ahorrar por parte de los dirigentes políticos municipales tinerfeños con responsabilidades de gobierno también afecta a aquellos que están en la oposición. En Candelaria, el equipo que dirige José Gumersindo García Trujillo propuso y sacó adelante, con el respaldo de los afectados, la reducción de lo que el ayuntamiento paga por asistencias a plenos y comisiones informativas. Es decir, las cuantías menores que cobran todos los concejales de la corporación.

Buen ejemplo

En el momento en que las encuestas más oficialistas reflejan que la clase política es la que peor valoración tiene, los regentes tinerfeños parecen haber dado muestras de solidaridad con los administrados y, sobre todo, con los empleados públicos.

En todos los casos, se alude a la "solidaridad" con el "importante sacrificio" al que se han visto obligados "todos los empleados públicos de este país".

Todo este proceso parte de la decisión del Gobierno central, que aprobó el Real Decreto Ley 20/12, el pasado 13 de julio, por el que se establecían medidas tendentes a garantizar la estabilidad presupuestaria que, entre otras, recogía la eliminación de la paga extraordinaria de Navidad para los trabajadores y empleados públicos como consecuencia de la situación económica actual.