Sin que, por una vez, se hable de economía, actividad comercial, portuaria y de otros ámbitos, la capital tinerfeña se ha frenado para bien en un aspecto vital clave: reducir los riesgos de accidentes en carretera. Según los datos facilitados ayer por la Policía Local de Santa Cruz, los radares del servicio de Atestados de este Cuerpo ha detectado un relevante descenso en el número de infracciones por exceso de velocidad en las quince vías del municipio que están controladas desde hace tiempo por dichos mecanismos.

Los datos surgen tras la campaña específica sobre velocidad emprendida y coordinada por la Dirección General de Tráfico (DGT), que se desarrolló entre los días 20 y 26 de este mes y que contó con el apoyo de los agentes municipales, quienes incrementaron sus controles en los quince puntos seleccionados y durante diferentes franjas horarias.

Dichos puntos de control se situaron en las avenidas Anaga, Asunción, Reyes Católicos, Constitución, Benito Pérez Armas, Bélgica, Las Hespérides y Los Majuelos. También en la autovía de San Andrés, en el acceso desde la autopista del Sur (Tf-5), junto a la calle Panamá; en las vías Pedro Hernández Suárez y Álvaro Acuña Dorta, y en la Tf-28, a la altura de El Chorrillo.

Como resultado de esta campaña especial, analizó un total de 5.454 vehículos, de los que solo 42 infringieron los límites de velocidad de manera excesiva, lo que supone un porcentaje de conductores sancionados del 0,77 por ciento.

Según la Policía local, este dato "cobra aún más importancia si se tiene en cuenta que el año pasado, dentro de esta misma campaña, el porcentaje de sanciones fue del 5,93 por ciento del número de vehículos controlados, que además fue notablemente inferior, cifrándose en 1.768 vehículos".

Durante los controles de este año, los agentes dieron el alto e identificaron a cuatro conductores que sobrepasaron, de manera excesiva, los límites de velocidad establecidos para las vías en las que fueron detectados incumplimiento el reglamento de circulación.

Los datos arrojan dos infracciones destacables por encima de las demás durante la semana anterior en dichas vías: una se produjo en la avenida de La Constitución, donde un turismo fue sancionado el 22 de agosto por circular a 101 kilómetros a la hora, cuando la velocidad en esa zona se limita a 50; y la otra se dio, un día después, en la calle Pedro Suárez Hernández a idéntica velocidad.

Intensificar la seguridad

Estos controles se han sumado este año a la iniciativa del gobierno local de aceptar la propuesta de una empresa privada para colocar detectores en los semáforos para saber si los conductores se saltan los rojos. Dicho mecanismo ha aportado hasta ahora datos muy reveladores de las imprudencias de muchas personas que no respetan el paso del verde o el ámbar al rojo por creer que les da tiempo de atravesar las intersecciones o simplemente por saltarse la señal que prohibe continuar con la circulación.

Los resultados han sido tan espectaculares, si bien se han ido moderando en las últimas semanas, que el gobierno local se plantea comprar estos equipos a esta compañía o a otras y extenderlos por la ciudad para reducir así la conducción temeraria y, con ello, los riesgos de accidente. Entre otros lugares, este mecanismo, que saca fotos del momento del cambio del semáforo, se han colocado en la rambla Santa Cruz y en la avenida Tres de Mayo.

el dato

0,77%

En 2011, hubo un 5,9% de infracciones frente al 0,77 de ahora