Justo en pleno verano, cuando más usuarios acuden a la popular playa del Club Náutico, ubicada en la desembocadura del barranco de Tahodio, la Autoridad Portuaria ha decidido impedir el acceso de vehículos a los estacionamientos de la antigua estación del jet-foil.

Esta medida ha generado malestar entre las familias que a diario acuden a este enclave de Muelle Norte, ya que se han quedado sin medio centenar de estacionamientos, lo que les obliga a buscar sitio en la congestionada urbanización de Residencial Anaga.

La principal queja redunda en que "tienen que hacer un gran recorrido tanto personas mayores como aquellas que padecen de movilidad reducida, y que hasta no hace mucho podían llegar a este enclave de costa en coche".

Los usuarios de esta pequeña playa, según Raúl Miranda, presidente de la asociación de mayores La Alegría del Palomar, sospechan de que esta decisión obedece a una medida que persigue acabar con el botellón, que algunos fines de semana ha concentrado a cientos de jóvenes en este enclave. En este sentido, lamentan que "pagamos justos por pecadores", y, según Miranda, "nadie nos ha comunicado nada y solo nos hemos encontrado con las cadenas y las señales ya instaladas".

El presidente del colectivo de mayores señaló que este tipo de decisiones "solo perjudica a los mayores y familias que tienen que recorrer cientos de metros con sus bolsos y utensilios a cuestas".

Raúl Miranda manifestó que "parece que solo quieren perjudicar a las personas más humildes, que cada vez contamos con menos espacios para el baño en esta ciudad". No obstante, precisó que, si lo que se pretende es evitar el botellón, "deberían mantener el acceso durante la semana y cerrarlo los fines de semana o por las noches. Sin embargo, "aquí se trata de prohibir por prohibir, porque cada día tenemos menos posibilidades de disfrutar de los pocos rincones de costa".

Por su parte, la Autoridad Portuaria señaló que se trata de una medida que obedece a criterios de seguridad y operatividad, pues indica que se trata de una zona de muelle en la que trabajan los prácticos, a los que hay que facilitarles los accesos. No obstante, puntualizan que solo se ha cerrado el acceso rodado, pero que no se impide el paso de las personas.