El Ibex ha celebrado con un rebote del 4,91% la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de comprar bonos soberanos, buena nueva para España que ha apuntalado la canciller alemana Angela Merkel con su apoyo a las reformas y a la política económica de Mariano Rajoy. Las palabras del presidente del BCE, Mario Draghi, no han decepcionado esta vez al mercado y han permitido que la prima de riesgo baje hasta los 446 puntos.

Draghi ha confirmado este jueves que el BCE comprará deuda soberana de los países en crisis de la eurozona con el objetivo de garantizar la "irreversibilidad" del euro, aunque esta intervención estará sujeta a "estrictas condiciones" y deberá ir precedida por una petición de ayuda al fondo de rescate de la UE por parte de los Gobiernos beneficiarios.

El programa, que "no tendrá límites previos", se concentrará en la adquisición en los mercados secundarios de bonos con vencimientos entre uno y tres años. Por otra parte, la institución prevé "esterilizar completamente" la liquidez inyectada en el sistema con estas compras, de las que se informará cada semana de forma agregada.

Asimismo, este jueves se ha celebrado la cumbre hispano-alemana, en la que Merkel y Rajoy han dialogado sobre las reformas puestas ya en marcha a nivel nacional y europeo, con Merkel elogiando los esfuerzos del Ejecutivo de Mariano Rajoy y brindándole su apoyo y el del pueblo alemán.

"Ha habido muchas noticias y todas han sido muy buenas", explica la experta de Selfbank Victoria Torre, en alusión a la subasta del Tesoro español, a las palabras de Draghi y Merkel e incluso a los datos procedentes del otro lado del Atlántico, como el informe de empleo privado de EEUU.

Para la experta, cabían pocas posibilidades de que Draghi no cumpliera las expectativas del mercado a la luz de los detalles de la compra de deuda que habían trascendido y de los esfuerzos acometidos por España, entre ellos la última reforma financiera para recibir el rescate bancario europeo para recapitalizar la banca.

El mercado ha optado, sin embargo, por obviar algunos detalles que podrían haber aguado el festejo, como la necesidad de que España pida un rescate total para beneficiarse de la compra de bonos por parte del instituto emisor europeo, o por la rebaja de las previsiones de crecimiento de la Eurozona.

"Los anuncios son muy positivos, pero no está justificado que el Ibex continúe la fiesta sin más, hay que culminar todas las reformas, la financiera y las medidas de ajuste del déficit entre otras", destaca Torre.

"La lógica nos dice que esto es bueno y era necesario, pero tampoco podemos pensar que esto vaya a ser la panacea", dice la analista, para quien es de esperar una mayor mejora de los costes de financiación de España.

Torre detalla que la compra de bonos soberanos a uno y tres años por parte del BCE puede incrementar la demanda de deuda a diez años por parte de los inversores privados, lo que podría bajar el tipo de interés por debajo del 6,05% actual.

Con estas perspectivas, el selectivo madrileño se ha anotado una subida del 4,91% y ha reconquistado la cota de los 7.800 enteros, con lo que recupera los niveles de principios de abril, y se ha anotado la mayor subida de Europa.

Aunque con menos euforia que en Madrid, las compras también han cundido en Milán (,3%), París (,85%), Francfort (,71%) y Londres (,01%), mientras que en el mercado de divisas el euro ha avanzado en su pulso frente al dólar y marcaba 1,2630 ''billetes verdes'' al cierre en el Viejo Continente.

Solo dos valores del Ibex 35, BME (-2,13%) y Bankia (-1,01%), cerraron en ''rojo'', mientras que las mayores subidas fueron para Mapfre (,38%), Repsol (,29%) y Sabadell (,96%).

Entre los ''blue chips'', las mayores ganancias se las llevaron Iberdrola (,6%), Inditex (,39%) y Telefónica (,32%), aunque también repuntaron de forma importante BBVA (,29%) y Santander (,6%).

LA PRIMA SE DESPIDE DE LOS 500 PUNTOS, CERRANDO EN LOS 446 ENTEROS

La prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos españoles a diez años respecto a sus homólogos alemanes se situaba tras el cierre de los mercados europeos en 446 puntos básicos, lo que supone una caída de más de cincuenta puntos respecto a la apertura.

La rentabilidad se ha situado en el 6,074%, lo que relaja el diferencial a niveles del pasado mes de mayo, gracias a la confirmación de que el BCE comprará bonos soberanos de España si el Gobierno pide el rescate.

Concretamente, los 446 enteros del cierre de mercado representa la prima más baja de los bonos españoles desde el pasado 11 de mayo, mientras que el interés del 6,074% es el menor desde mediados de junio, frente a los 499,1 puntos de la apertura.

Asimismo, el alivio de la intervención de Draghi se ha hecho sentir en las rentabilidades ofrecidas por los bonos españoles a más corto plazo, ya que el interés de la deuda a dos años bajaba al 3,178%, mientras que el de a un año se situaba en el 3,021%.

EL TESORO COLOCA EL MÁXIMO EN LA SUBASTA DE BONOS

También en el mercado de deuda, el Tesoro Público ha cumplido una vez más su objetivo y ha colocado 3.500,95 millones, el máximo previsto, en bonos a precios mucho más bajos, aún a la espera de la comparecencia del presidente del BCE.

De esta forma, el organismo se ha quedado en la parte alta del rango, ya que esperaba captar entre 2.500 y 3.500 millones de euros. La demanda casi ha duplicado la cantidad colocada al rozar los 6.500 millones de euros, pero ha bajado respecto a otras subastas.

En concreto, el organismo ha colocado 1.426,56 millones en bonos a 3 años con cupón del 4% y vencimiento a 30 de julio de 2015 de los 2.505,04 solicitados por los inversores, cuyo tipo de interés medio ha bajado hasta el 3,676%.

Por otro lado, el Tesoro ha emitido 1.392,04 millones en bonos a 4,2 años con cupón del 4,25% y vencimiento a 31 de octubre de 2016 de los 2.593,41 millones pedidos por el mercado. Los tipos se han recudido hasta el 4,603%.

Finalmente, el organismo ha colocado 682,35 millones en bonos a 1,7 años con cupón del 3,40% y vida hasta el 30 de abril de 2014 de los 1.369,39 millones solicitados, con una rentabilidad media del 2,798%.

De esta forma, el Tesoro ha superado una nueva prueba gracias a la tregua concedida por los mercados, lo que ha permitido que la prima de riesgo española perdiera la cota de los 500 puntos básicos.

De hecho, el diferencial entre los bonos españoles a diez años y sus homólogos alemanes se situaba tras la subasta del Tesoro Público en 479,1 puntos básicos, con una rentabilidad del 6,30%.

Tras esta subasta, el Gobierno ha asegurado que cree que el Tesoro Público puede afrontar la recta final del año "desde una posición cómoda y sin presiones añadidas de mercado", puesto que ya ha colocado el 76,8% de la previsión de emisión de instrumentos a medio y largo plazo para todo el año, hasta un total de 65.954 millones.

Así, el Ejecutivo ha destacado que la demanda de títulos públicos continúa "fuerte" a pesar del actual estado de incertidumbre en la eurozona y ha recordado también que los tipos han bajado "de forma significativa" en los tres bonos emitidos.