Vecinos de las 94 Viviendas de Protección Oficial (VPO) de La Trujilla, en Cabo Blanco, están cansados de la desidia que está mostrando el gobierno local de Arona para que proceda a la mejora y adecuación de este entorno, "tal y como en su momento se comprometió el alcalde, José Alberto González Reverón".

"El gobierno local no ha completado el acerado y el alumbrado de la calle Orilla, además la vía no está asfaltada y, al estar de tierra, tiene unos enormes socavones", explican indignados.

"De hecho, algunos baches son tan grandes que hay coches que prácticamente se han quedado encajados y a algunos se le ha roto la amortiguación y el neumático", expresan.

"Además, es necesario que se continúe colocando la barandilla que separa la calzada de un pequeño barranquillo, que evitará peligros innecesarios tanto a los vecinos como a los que vengan a caminar por este entorno" de La Trujilla, manifiestan los denunciantes.

"Por si fuera poco, no contar con el acerado está provocando múltiples situaciones de inseguridad vial, las que se multiplican por las noches al quedarse la calle en penumbra", indican.

"La carencia de alumbrado adecuado ha provocado caídas, precisando los afectados, en algunos casos, atención sanitaria, principalmente mayores y niños", expresan.

"El gobierno local de Arona no puede continuar mirando hacia otro lado y debe proceder a la mejora y adecuación" del entorno de las 94 VPO situadas en la zona de La Trujilla "a la mayor brevedad", comentan.

"Lo que no puede ser es que dicho problema se eternice en el tiempo, como está ocurriendo en la actualidad", resaltan los comunicantes a este periódico.

"Incomodidades"

De este modo, aseguran que "desde hace cinco años venimos padeciendo todas estas carencias e incomodidades y, a pesar de que en reiteradas ocasiones se lo hemos puesto en conocimiento de las autoridades locales, ellos pasan olímpicamente de nosotros y, mientras tanto, los perjudicados somos las familias que aquí residimos", resaltan.

"En 2007 trasladamos al Ayuntamiento aronero una recogida de firmas, logrando unas 200, pero ni aún así los nacionalistas se han dignado en llevar a cabo estos trabajos básicos", manifiestan.

Por otro lado, advierten de problemas relacionados con la limpieza y debido "a que la misma no es buena hemos visto ratas de gran tamaño merodeando por la zona" de las viviendas protegidas.

"Asimismo, los malos olores son una constante derivado de la suciedad que hay por este entorno" del municipio, manifiestan los denunciantes, quienes exigen a los nacionalistas aroneros "que inicien una campaña de desratización con urgencia porque tenemos miedo de que los roedores se multipliquen y entren en las viviendas".

Aunque este periódico puso en conocimiento dicha queja de los vecinos de La Trujilla al grupo de gobierno de Arona, los nacionalistas, en su habitual tónica, han preferido guardar silencio.