Dos bajadas del 5 por ciento del salario, una por parte del Gobierno central y otra del Ejecutivo canario, y la supresión de la paga de Navidad son algunos de los recortes que han llevado a los funcionarios de Justicia a "negarse" a hacer horas extras desde hace dos meses, así como a realizar tareas que les correspondan por ley, informó el presidente de la Junta de Personal de Santa Cruz de Tenerife, Gregorio Pérez, quien informó que continuarán limitándose a cumplir con su horario laboral.

Esta medida de "presión" está provocando mayores retrasos en la tramitación de los asuntos judiciales, algo de lo que ya se han quejado, de forma particular, algunos abogados, mientras que, según detalló Pérez, ha sido aceptada por jueces, magistrados y fiscales, quienes fueron avisados de esta decisión antes de ejecutarla.

Cabe recordar que el horario laboral de los funcionarios de Justicia es de 9:00 a 14:30 horas, además de otras dos horas semanales. Pese a este horario, los trabajadores, de forma voluntaria, solían permanecer más tiempo en su puesto, e incluso acudir por las tardes o los sábados, para aligerar la importante carga de trabajo que hay en algunos juzgados.

A raíz de la decisión unilateral "adoptada por el Gobierno de Canarias de incumplir los acuerdos administración-sindicatos firmados y publicados en mayo de 2006 y noviembre de 2009, relativos a la modernización y mejora del servicio público de la justicia en Canarias", los funcionarios han puesto fin a su "buena fe", y se limitan a cumplir el horario que establece su contrato, por lo que no se podría hablar de huelga de reglamento o celo.

Otra medida que se está llevando a cabo es exigir la presencia judicial del secretario en la tramitación procesal, tal y como marca la ley. Hasta ahora, los funcionarios de los cuerpos de Gestión y Tramitación asumían determinadas tareas, como tomar declaraciones a los testigos, sin la presencia judicial, algo que ya no "realizarán más". De ahí que en algunos juzgados de Instrucción, Penal y Social, se esté estableciendo un único día para realizar estas gestiones, informó Gregorio Pérez.

Esto está provocando importantes retrasos en el despacho ordinario de los asuntos, algo que, según Pérez, no se puede reprochar a los trabajadores, sino a la falta de medios materiales y personales.

En cuanto a la celebración de los juicios, el funcionariado también ha decido cumplir su horario de forma estricta, haya finalizado o no la vista oral, destacó el representante sindical, quien señaló que tampoco se asumirán las cargas de trabajo de otros compañeros cuando estos estén de baja o de permiso, pues se debe nombrar a personal sustituto.

Estas medidas de presión están provocando mayor retraso en los asuntos judiciales, lo que comienza a crispar a algunos letrados. Pese a ello, los trabajadores piden comprensión, y recuerdan que en ningún momento están incumpliendo con sus obligaciones laborales.

Cabe señalar que, pese a que una parte considerable de la plantilla ejecuta estas determinaciones, lo cierto es que algunos trabajadores no están de acuerdo con ellas.