Los extranjeros se han deshecho en lo que va de año de unos 86.900 millones de euros en deuda española, un 30 % de lo que tenían a finales de 2011, hasta un total de 194.573 millones de euros, según datos del Tesoro.

Solo en el mes de agosto, los no residentes han vendido 8.698 millones de euros, lo que supone un descenso del 4,3% con respecto al mes anterior.

Este descenso ha colocado la cifra de deuda en manos de extranjeros por debajo de los 200.000 millones, lo que no ocurría desde el año 2009,.

Hace un año, en agosto de 2011, la deuda en manos de los no residentes se encontraba en 295.581 millones de euros, lo que supone que en los últimos doce meses esta partida ha decrecido exactamente en 101.008 euros.

De la partida total, la mayor parte, 169.594 millones de euros, es deuda a largo plazo, bonos y obligaciones, y 22.242 millones en letras a corto plazo.

La difusión de estos datos coincide con la información, publicada el pasado sábado, sobre los planes del Tesoro para 2013, ejercicio en el que tiene previsto emitir 207.173 millones de euros en deuda.

Esta cifra hará que el peso del endeudamiento del conjunto de las administraciones pase del 85,3 % del PIB en 2012 al 90,5 % en 2013, en zona de máximos.

El coste del pago de intereses de la deuda ascenderá a 38.590 millones de euros, en términos de caja, o a 36.460 millones en términos de contabilidad nacional. En ambos caso supondrá en torno al 3,5 % del PIB.

Detrás de esta fuerte subida del peso de la deuda se encuentran no solo las necesidades de endeudamiento por la crisis económica, sino también el préstamo europeo para la banca, así como la aportación de España al rescate de Grecia y Portugal, el programa de pago a proveedores, y el fondo para titulizar el déficit de tarifa eléctrica, el FADE.

Aunque el préstamo europeo para recapitalizar la banca asciende a 100.000 millones de euros, en los presupuestos solo se han contabilizado los 30.000 millones del pago inicial "comprometidos, pero no desembolsados".

Otro elemento que explica el aumento de la deuda es la aportación que España tiene que hacer al Mecanismo Europeo de Estabilidad por un importe de 3.809 millones de euros.