Sergio Aragoneses asegura que ni los técnicos ni los futbolistas del Tenerife están inquietos por la necesidad de demostrar que la serie de tres jornadas sin ganar, empeorada por la mala imagen ofrecida en la reciente visita al Fuenlabrada, obedece a una trayectoria descendente del equipo. "Nosotros estamos tranquilos", afirma el capitán, quien, no obstante, percibe otras sensaciones en la calle. "Quizás el entorno está un poco más nervioso", advierte un jugador que conoce de sobra al tinerfeñismo.

"Ya sé cómo funcionan las cosas aquí y nada me pilla por sorpresa", explica el guardameta, partidario de no dejar colar en el vestuario comentarios que puedan ser nocivos para el grupo. "Tenemos que aislarnos de todo eso", indica el pontevedrés, quien aprovecha la ocasión para hacer un llamamiento a la afición. "Le diría a que tenga confianza en el equipo, porque lo estamos intentando dar todo cada día para que la gente también tenga su alegría esta temporada".

A su juicio, el Tenerife parte con la ventaja de "tener la fórmula" para recuperar su mejor versión cuanto antes, en el encuentro del domingo que viene ante el San Sebastián de los Reyes. "Solo hay que hacer las cosas como las veníamos haciendo", considera.

Puesto a analizar los motivos que condenaron al equipo en Fuenlabrada a sufrir un "pequeño resbalón", tiene claro que no hubo falta de actitud. "Ese nunca ha sido un problema", sostiene Aragoneses, quien sí entiende que coincidieron diversos elementos que no ayudaron. "Hay días en los que, a lo mejor, no estás todo lo acertado que esperas y aparecen factores externos que quizás no te dejan rendir al cien por cien, ya sean el horario o el campo. Y no son excusas, pero al estar habituados a otras cosas sí te trastocan un poco".

En cuanto a la respuesta de los futbolistas en el estadio Fernando Torres, no esconde que la de la pasada jornada no fue la "manera de jugar" del Tenerife de Álvaro Cervera. "No nos comportamos como otras veces y tampoco estuvimos a la altura habitual".

Al repasar las últimas actuaciones en Liga del representativo, Sergio tiene en cuenta que tanto en el encuentro con el Sporting de Gijón B, que acabó con la victoria de los asturianos por 3-2, como el que midió luego a los blanquiazules con el Real Oviedo -empate a un gol-, "el equipo estuvo mucho más cerca de ganar que de otro resultado", pero le faltó el "acierto ofensivo de anteriores partidos", por lo que el promedio de puntuación "no fue el deseado". En cambio, está seguro que el tropiezo en Fuenlabrada no tiene relación con los dos anteriores.