Si bien había demostrado una no-table mejoría en cada entrenamiento desde que se lesionó el 2 de diciembre, en el partido con el Oviedo, fue ayer cuando resultó más evidente que lo normal es que su vuelta a la competición se acerque al plazo mínimo de recuperación programado por los médicos. Y es que Luismi Loro fue noticia por participar en los ejercicios colectivos, siempre con el balón de por medio. En esa primera toma de contacto con la rutina colectiva, el mediapunta trabajó como uno más, aunque se cuidó de no arriesgar demasiado para evitar recaídas.

Se supone que este avance no significa que Álvaro Cervera vaya a contar con el jugador para el encuentro de pasado mañana con el Sanse, ya que para entonces Luismi no se encontrará plenamente restablecido, pero sí es probable que lo pueda incluir en la convocatoria del compromiso con el que el Tenerife cerrará 2012, el del viernes 21 de diciembre ante el Alcalá, en el Virgen del Val.

De ser así, se cumplirá la previsión más optimista que estableció el médico del Tenerife cuando publicó, el 4 de diciembre, el informe correspondiente al diagnóstico de la lesión -esguince en el tobillo izquierdo-, dado que situó el período de baja de Luismi en unas tres o cuatro semanas.

Loro se ha tomado muy en serio su recuperación y, bajo la supervisión del fisioterapeuta José Cristóbal, ha seguido un proceso impecable, incluso con alguna "escapada" al monte esta semana para hacer unos kilómetros de carrera.