Lo mismo que Raúl Llorente afir-ma que la situación en la que se encuentra el CD Tenerife es "para gente valiente", la semana posterior a la derrota en Fuenlabrada se presta a las reflexiones del lateral izquierdo. El madrileño repasa la trayectoria del conjunto blanquiazul en Liga y trata de explicar por qué no se está mostrando tan solvente como en las primeras jornadas. Además, sostiene que alcanzar el objetivo de terminar la temporada en el primer puesto de la clasificación sigue estando "en manos" del equipo.

¿Qué análisis hace de la situación en la que está el Tenerife?

Ahora mismo la situación está para gente valiente, para gente ambiciosa. Creo que esas son cualidades que nos han definido esta temporada y estoy convencido de que seguiremos igual. No vamos a decaer a las primeras de cambio por ver que los resultados o el juego del equipo no están saliendo como queremos. Más bien, todo lo contrario. Cuando las cosas van bien todo sale más o menos rodado, pero cuando no es así hay que ponerle más empeño, si cabe, para darle la vuelta a la situación y volver a como estábamos antes. En ese sentido estamos tranquilos.

¿Cree que el equipo está en un cruce de caminos, que necesita tomar decisiones cruciales?

Estando en el momento de la temporada en el que nos encontramos, la solución depende de nosotros. Está en nuestras manos llegar al final de la temporada siendo los primeros de la clasificación, o segundos, terceros, cuartos o lo que sea. Si seguimos en nuestra línea de trabajo, de esfuerzo, de competitividad y demás, acabaremos la fase regular de la Liga ocupando, en este caso, el primer lugar, que es el objetivo que nos hemos marcado. Otros equipos no pueden decir lo mismo, pero el Tenerife sí, porque insisto que está en nuestras manos ser líderes al final.

¿Entiende que algunos aficionados se sientan preocupados? ¿O será que la referencia del excelente arranque de Liga del Tenerife ha puesto el nivel de exigencia demasiado alto?

Todos nos acostumbramos a lo bueno, incluyendo a los futbolistas. Es normal que la gente se queje o nos exija más al ver que el equipo desplegó un buen juego y no perdió al principio de la Liga, y que, en cambio, en las últimas jornadas las cosas no han salido de igual manera. La afición sabe que en esta plantilla hay mimbres y es lógico que nos pida más. Es entendible. Y lo que queremos es que la gente esté tranquila, porque vamos a revertir esta situación, seguro. En realidad, parece que estamos hablando de un momento dramático y no es así, en ningún caso. Estamos en una situación buenísima. ¿Cuántos querrían estar como nosotros ahora? Muchísimos. Lo que ocurre es que no estábamos acostumbrados a vernos así, a perder o a no ser líderes, pero vamos a volver a ponernos primeros, y ojalá sea con buen juego y con resultados abultados. Antes o después pasará, estoy seguro.

¿Sucede algo con el juego? ¿Es posible que el Tenerife haya perdido su identidad?

Siempre intentamos jugar de la misma manera, aunque es cierto que fuera hay campos más pequeños o peores que el Heliodoro, y así es más difícil. En casa casi todos los rivales se cierran atrás y quizás nos ceden más la posesión del balón. También pasa que los contrarios nos tienen bastante estudiados y saben cuál es nuestro fútbol, el de tener la pelota y abrir a una banda y a otra. Ya saben cuáles son nuestros puntos fuertes y débiles y, a partir de ahí, elaboran una estrategia para competir contra nosotros. Por eso puede ser que ahora nos esté resultando un poco más complicado desplegar nuestro juego; esa es la única manera que encuentro para explicarlo. De otra forma no lo entendería, porque nosotros jugamos queriendo tener la pelota y, además, de mitad de campo hacia delante tenemos jugadores de otra categoría, están sobrados. Con la calidad que demuestran y que atesoran no es normal que no estemos desplegando nuestro verdadero juego. La única respuesta que se me ocurre es que los rivales nos estudian demasiado y sa-ben por dónde nos pueden coger para que no seamos tan claros.

¿Esa necesidad de recuperar sensaciones cuanto antes podría crear un estado de ansiedad en el equipo? ¿Le preocupa eso?

No lo creo. Quizás a más de uno no le gusta tanto lo que pienso, pero lo principal es ganar. Jugar bien es secundario. Lo de autopresionarnos y demás, para nada. Nosotros estamos tranquilos, sabemos que se nos está exigiendo y nosotros queremos esa exigencia, porque creemos que le podemos ganar a cualquier equipo. Entonces, vamos a salir al campo con la intensidad que ponemos en cada partido, a competir, que es lo que nunca debe faltar, y ya está, pero no hay que estar nerviosos ni pensar en lo que puedan decir o lo que puedan pensar, porque los partidos son largos y hay que madurarlos de principio a fin. Si no entra el balón, ya entrará. Y, sobre todo, volver a dejar nuestra portería a cero, que no nos metan goles y tener a Sergio imbatido cuanto más, mejor.